Vitoria. No pudo ser. El Araberri puso toda la carne en el asador e hizo gala de la fe que le ha caracterizado en los puntos álgidos de este curso tras remontar 23 puntos y forzar la prórroga pero no pudo llevarse el segundo partido de las semifinales ante el Aguas de Sousas Orense (94-92) , con lo que regresa a Vitoria con su casillero de victorias sin estrenar en esta eliminatoria de semifinales de la LEB Plata.
El partido arrancó igualado. Ortiz de Pinedo y, sobre todo Ausina -ambos determinates en el encuentro con números de ensueño: Albert Ausina (15 puntos y 26 valoración) y Ander Ortiz de Pinedo (30 puntos y 26 valoración)-, mantenían al equipo con la aportación de Thompson desde la pintura. 23-23 al final del primer cuarto. El comienzo del segundo periodo fue un espejismo para los araberristas. La primera canasta de este cuarto les aupaba en el marcador, aunque no era más que la calma que precede a la tempestad. Una tempestad que aún tardaría en llegar. Los pupilos de Iñaki Merino se mantuvieron en el partido hasta poco antes del ecuador de este tramo. A partir de entonces, los gallegos se pusieron el mono de trabajo y comenzaron a construir una ventaja que llegaría hasta los 23 puntos.
60-37 en el electrónico a mitad del tercer cuarto. Todo el pescado parecía vendido. Fue entonces cuando asomó el temperamento de una plantilla que lleva dos campañas demostrando su implicación. Nada que envidiar al conocido carácter de sus vecinos. Tras mucho batallar se llegó dos abajo a la última jugada. La estrategia de Merino, palmeo mediante de Arcelus, empataba el choque a 83. Había que jugar la prórroga.
A falta de medio minuto para finalizar el choque, los alaveses mandaban por 91 a 92, pero la réplica gallega por medio de Vicens, zanjó el encuentro ante el tapón al intento de triple final por parte de Pinedo. Habrá que apelar al factor Mendi para dar la vuelta al cruce.