Vitoria. El Athletic Club recibirá al Real Madrid en San Mamés con la intención de lograr una victoria que podría retrasar el alirón liguero del equipo blanco en el caso de que el Barcelona gane al Málaga en el Camp Nou, aunque le serviría de poco para apurar sus ínfimas opciones de alcanzar la Liga de Campeones. La derrota encajada la última jornada en La Romareda ha alejado al conjunto rojiblanco a siete puntos de la cuarta plaza cuando sólo quedan nueve por disputarse, una distancia prácticamente insalvable para un equipo que inevitablemente tiene puestas sus miras en las finales de la Liga Europa y de la Copa del Rey.

No obstante, la visita de los hombres de José Mourinho presenta los suficientes alicientes, tanto para el Athletic como para su afición, como para hacer pensar que los locales se exprimirán al máximo con el fin de lograr una victoria que sin duda sería muy celebrada en La Catedral. Marcelo Bielsa encara el partido sin los sancionados Ander Herrera y Ander Iturraspe, mientras que mantiene la duda de Fernando Amorebieta, que ha estado estos días entre algodones. Mourinho, que en la rueda de prensa previa al choque volvió a negarse a reconocer los méritos de Pep Guardiola, no podrá alinear a Di María para un partido al que el Madrid puede ya entrar como campeón o, si el Athletic no lo remedia, cantar el alirón sobre el césped.

Para evitar una celebración anticipada, el Barça está obligado a imponerse al Málaga en el Camp Nou. Guardiola no podrá contar ni con Alexis ni con Piqué, ambos con molestias. Además, hoy se juegan otros cuatro partidos en los que pueden clarificarse mucho las opciones de todos los aspirantes a hacerse con alguna de las plazas que conceden derecho a disputar competiciones europeas.