Melbourne. La lesión de Anabel Medina en el último partido de la sesión del Abierto de Australia empañó una jornada de éxito para el tenis español, ya que anteriormente los tres jugadores que entraron en liza en la tercera ronda, consiguieron clasificarse para los octavos de final. En octavos, Rafael Nadal y Feliciano López se enfrentarán entre sí, asegurando la presencia de un español en los cuartos de final, mientras que Nicolás Almagro lo hará ante el checo Tomas Berdych.

Nadal abrió la jornada ante el eslovaco Lukas Lacko, único superviviente de la fase previa. El número dos del mundo jugó un partido muy completo, pero sobre todo exhibió una seguridad y efectividad al servicio espectacular, cediendo tan solo cuatro puntos al saque entre el segundo y el tercer set.

Ya en octavos de final se enfrentará a Feliciano López, quien por primera vez en su carrera alcanza esta ronda en Melbourne, tras superar en cinco sets al estadounidense John Isner. El jugador toledano se complicó él solo el partido, ya que tras apuntarse la primera manga perdió la segunda después de disponer de saque para ganar con 5-3.

De nuevo se metió en el partido ganando bien el tercer set, pero perdió el desempate en el cuarto y el partido se fue a una quinta manga, en la que Isner, con ampollas en los pies tras su paliza de cuatro horas en el anterior partido ante el argentino David Nalbandian, se vino abajo tras perder rápido su servicio.

Nicolás Almagro alcanzó los octavos de final por tercer año consecutivo, tras ganar con un tenis muy sólido al suizo Stanislas Wawrinka.

El tenista murciano, décimo cabeza de serie del torneo, se ha marcado esta temporada como uno de sus principales objetivos equiparar sus prestacones en pista rápida a las que tiene sobre tierra batida y está evidenciando una sensible mejoría en este sentido. Su próximo duelo lo disputará contra el tenista checo Tomas Berdych.