madrid. El Tribunal de Arbitraje Deportivo ha desmentido que el juez israelí Ephraim Barak, el presidente de la comisión que estudia el caso de Alberto Contador, puediese estar influenciado a favor del madrileño por la estancia que realizó a inicios de diciembre su equipo, el Saxo Bank, en Israel, donde surgió el compromiso de realizar un proyecto de escuelas de ciclismo.

Las suspicacias fueron creadas por el propietario del RadioShack-Nissan, Flavio Becca, que en declaraciones recogidas por Le Quotidien, recalcó que la formación de Bjarne Riis había sido incluso "oficialmente recibida por el gobierno" y que eran factores que no podían ser "separados", por lo que, en su opinión "todo estaba ya decidido".

"Normalmente no comentaría tales alegaciones, pero es tan triste las acusaciones realizadas contra nuestra autoridad, credibilidad, y uno de nuestros jueces, que subrayaré que es una especulación falsa sin ninguna base en la realidad", indicó el portavoz del TAS, Matthieu Reeb, en la web del diario deportivo danés sporten.dk.

Además, dejó claro que Barack no estaba "en venta" y que tenían "mucha confianza en su independencia". "Si se revisa su currículo, uno se da cuenta de que no tiene ninguna conexión con el mundo del ciclismo o el gobierno israelí", sentenció. El juez israelí preside la comisión de tres hombres en el Caso Contador y es el único asignado de forma independiente ya que el alemán Ulrich Haas fue elegido por la Unión Ciclista Internacional y la Agencia Mundial Antidopaje, y el suizo Quentin Byrne-Sutton, por el ciclista español.