Vitoria. El idilio que mantienen Leo Messi y el Barcelona se antoja eterno. Al menos ambas partes así lo desean. El hecho de que el club pretenda amarrar por mucho tiempo a su gran estrella resulta algo obvio. Pero no tanto que el futbolista, criado en la cantera azulgrana desde que llegó siendo un niño, realice exhibiciones de amor incondiional como la que ofreció ayer en una entrevista concedida a la cadena televisiva Fox.

"Es un error comparar al Barcelona con cualquier otra cosa. Por algo es el mejor equipo del mundo. Yo no cambiaría por nada al Barcelona", manifestó en declaraciones al programa Debate Final. Messi, que no obstante matizó que al final de su carrera le gustaría "cumplir el sueño" de jugar en su país, añadió que disfruta "mucho" estando en el club blaugrana y compartiendo vestuario con jugadores de la talla de Xavi o Iniesta, quienes para él están entre los mejores futbolistas del mundo.

También tuvo palabras de elogio hacia su entrenador, Pep Guardiola, asegurando que sin el de Santpedor al frente del vestuario el Barça no sería "lo mismo". "Estoy feliz por cómo se me están dando las cosas en Barcelona. Estar en las inferiores en el Barça fue algo muy importante para mi carrera. Aquí te forman como jugador", recordó.

Y es que si algo echa de menos en Argentina es la formación humana de los jugadores y el no tener la continuidad necesaria, ya en la selección, como para crear un grupo. "No es bueno cambiar de técnico cada tan poco tiempo, pero también es normal porque depende de los resultados. Ha sido todo nuevo, no tuvimos mucho tiempo pero lo aprovechamos para trabajar muchas cosas, aspectos que quiere que agarremos para ir conociéndonos", comentó sobre el nuevo seleccionador de la albiceleste, Alejandro Sabella.

A pesar de que ha atravesado momentos duros tras verse cuestionado por sus compatriotas, Messi, que esta noche (20.45 horas) inicia un nuevo asalto a la Liga de Campeones, donde defiende título con el Barça, aseveró que jamás pensó en abandonar. "Nunca pensé en dejar la selección. Para mí es un orgullo ser argentino y siempre voy a querer jugar por mi selección. Yo sé que el de arriba me va a dar un Mundial. Por eso lo digo y por eso tengo esa ilusión", añadió.

El argentino también se avino a tratar temas espinosos en la entrevista, tales como las relaciones entre su equipo y el Real Madrid. Aseguró que intenta no dar importancia a las declaraciones que lleguen sobre su persona por parte del entrenador del equipo blanco: "A Mourinho intentamos no darle bola, aunque a veces dice algunas cosas que te calientan", comentó.

En lo personal, Messi mostró su lado más humano. Dijo que le gustaría poder salir a la calle sin los inconvenientes que tiene la fama y pasar inadvertido. No obstante, en el campo desaparece esta introversión y se convierte en un depredador. "Uno de mis defectos es que si no tengo la pelota a veces me pierdo en los partidos", desveló horas antes del duelo ante el Milan.