ATHLETIC Iraizoz; Gurpegui (Iraola, min.46), San José, Amorebieta, De Marcos; Javi Martínez; Markel Susaeta (Gabilondo, min.57), Iturraspe, Herrera, Muniain (Toquero, min.72); y Llorente.

RAYO VALLECANO Dani Jiménez; Tito, Arribas, Figueras, Casado; Piti (Delibasic, min.79), Movilla, Javi Fuego, Botelho (Néstor Susaeta, min.85); Trashorras (Lass, min.59) y Michu.

Goles 1-0, min.55: Iturraspe. 1-1, min.63: Movilla.

Árbitro José Antonio Teixeira Vitienes. Mostró tarjeta amarilla a los visitantes Arribas, Piti y Casado.

Estadio San Mamés. 37.000 espectadores.

Bilbao. El nuevo Athletic Club de Marcelo Bielsa protagonizó un gris estreno liguero ante el recién ascendido Rayo Vallecano, un rival, dirigido por José Antonio Sandoval, que completó un partido encomiable y fue capaz de igualar con un tanto Movilla un choque que le complicó el gol de Iturraspe, que había abierto el marcador ya en la segunda mitad. El equipo bilbaíno se mostró tierno para lo que quiere el acreditado técnico argentino, que pretende una mayor posesión y circulación de balón de las que buscaba en los cuatro años anteriores Caparrós. Por lo visto, le queda aún tiempo para conseguirlo.

Más rodados parecieron los de Sandoval, que al buen encuentro realizado en la primera hora le añadió la entereza de lograr el empate cuando el Athletic había logrado adelantarse y el choque parecía decantarse del lado rojiblanco.

Los visitantes, crecidos por su reciente regreso a Primera División y con las cosas más claras y en la línea de la temporada anterior, le robaron el balón a los locales en la primera media hora e intentaron buscarle las cosquillas a Iraizoz.

En el arranque de la segunda parte comenzó al asedio rojiblanco con una jugada en la que Llorente pudo ser objeto de penalti por parte de Dani Jiménez; lo continuó con la acción del 1-0, una gran jugada de Iturraspe dentro del área después de recibir un pase interior de Muniain. El canterano vizcaíno se deshizo de dos rivales en una carrera paralela a la línea de fondo y terminó ajustando el balón al primer palo de la portería vallecana.

Un centro de Gabilondo, bien habilitado por la magia de Iturraspe, que no encontró rematador, supuso el final del acoso local y dio paso a la réplica rayista, que pronto dio en la diana. Lo hizo Movilla sacando provecho una preciosa cesión con el pecho del recién incorporado Lass y fusilando a Iraizoz en el minuto 63 para lograr empatar.