CON los precedentes conocidos -léase el del Tour-, Euskaltel-Euskadi arrancó esta vez la crono por equipos realizando un papel aceptable al ceder solamente 28 segundos respecto a Leopard, o lo que es lo mismo, el equipo naranja estuvo en su sitio, si bien a priori aventuraba que incluso su puesta en escena podía ser algo mejor. Quedémonos con que, al final, ni frío ni calor, demostrando que se trata de un conjunto escalador, como quedó ya plasmado en la primera referencia. Intuyo que llega en buena forma a esta Vuelta donde Igor Antón nos puede dar una gran alegría con el respaldo de Mikel Nieve, y con un aspecto que les puede ir de cara: el hecho de que las etapas más duras estén fijadas para el tramo final. En esta puesta de largo el mayor beneficiado fue un Vincenzo Nibali, claramente aspirante a revalidar la corona y que sabe llevar el peso de la carrera, mientras que el desastre vino de la mano de Geox de Menchov, penúltimo y superando solo a Andalucía-Caja Granada. También veremos adelante a Leopard, con Monfort y Fuglsang -que tuvo el honor de ser el primer líder gracias a la locomotora Cancellara-, y lo que sí es seguro es que serán las bonificaciones quienes repartan los boletos a lo largo de la presente ronda. Si apuesto por Antón, también debo hacerlo por Purito, por un Scarponi que no empezó mal...