ESPAÑA Calderón (9), Fernández (5), Suárez (3), Reyes (3), Pau Gasol (15) -cinco inicial-, Sada (0), Claver (0), Navarro (9), San Emeterio (6), Rubio (0), Ibaka (5), Llull (4) y Marc Gasol (14).

ESLOVENIA Lakovic (8), Ozbolt (1), Dragic (11), Lorbek (8), Slokar (4) -cinco inicial-, Muric (2), Smodis (11), Dragic (10), Udrih (0), Jagodnik (2) y Begic (4).

Parciales 16-14, 20-11, 19-17, 18-19.

Árbitros Hierrezuelo, Pérez y Bey. Eliminaron por cinco faltas personales a Slokar y Ozbolt, minuto 29.

Pabellón Martín Carpena, ante 10.000 espectadores. En el descanso del partido la Real Federación Española de Baloncesto homenajeó a los internacionales Jorge Garbajosa y Carlos Jiménez, retirados de la selección, y les impuso el escudo de oro y brillantes del organismo federativo.

málaga. España, después del aviso que supuso perder contra Lituania en Kaunas, volvió al camino de la victoria con un triunfo en Málaga frente a Eslovenia (73-61), un conjunto que dio buenas sensaciones y demostró estar capacitado para hacerse notar en el Europeo.

El conjunto que dirige el italiano Sergio Scariolo volvió a mostrar sus virtudes, poderío en el rebote con los hermanos Gasol, Ibaka y Reyes, aunque también algunos defectos, como lagunas defensivas e irregularidad en el juego.

El cuadro de Scariolo estuvo muy espeso en el primer cuarto, sin excesiva intensidad defensiva, que aprovechó Eslovenia para estar algunos momentos por delante en el marcador 10-14 (m.8). Tuvieron que pasar varios minutos y con la entrada de Marc Gasol la defensa fue mucho más agresiva, lo que descongestionó el ataque.

Las rotaciones españolas iban sellando un triunfo parcial basado en la mayor calidad general del bloque, en el poderío defensivo y en el mejor posicionamiento de sus jugadores para el rebote.

El equipo español, que pasó un momento complicado en el tercer periodo (40-37, m.24) por un bajón físico, lo enmendó con otro jugador de la talla de Pau Gasol, algo oscuro en los primeros veinte minutos pero que mostró su calidad, al igual que Navarro, y se alcanzó la máxima diferencia a los 30 minutos con un 55-42.

No tuvieron piedad los hombres de Scariolo y los triples de Calderón, y San Emeterio, impidieron cualquier remontada.