pekín. El Milán, campeón de Liga, también se hizo con la Supercopa italiana tras remontar al Inter un parcial adverso en el primer tiempo y vencer por 2-1 en un partido vibrante en el espectacular estadio olímpico de Pekín. El conjunto neroazzurri arrancó el partido con más hambre de gol, con Sneijder como claro conductor avanzando sobre campo del Milan de la mano de Obi y del argentino Ricardo Álvarez. Los rossoneros fueron prácticamente unos espectadores durante la primera parte, lo cual se reflejó en el minuto 22 tras una falta en el borde del área que Sneijder convirtió en gol con un derechazo a la escuadra superior derecha imposible de atajar para Abbiati. El golpe generó una leve reacción del Milán, que estuvo cerca de la igualdad sobre el final de los primeros 45 minutos cuando Ibrahimovic conectó de cabeza un centro cruzado de Abate que dio contra el palo derecho de Julio César.

Los interistas aguantaron la presión un poco más hasta que a la hora de juego, Ibrahimovic puso la igualdad de cabeza con la portería a su disposición tras un centro de Robinho que rebotó en Seedorf y dejó descolocado a Julio César. Tras el gol, el técnico del Milán, Massimiliano Allegri, dispuso el ingreso de Pato en lugar de Robinho, de discreta actuación en el encuentro.

Un par de minutos en el campo le bastaron al recién ingresado para superar por la banda la ya para entonces desordenada defensa del Inter y, tras una maniobra rápida por la izquierda, el brasileño disparó rasante y el balón se estrelló contra el poste de Julio César. Rápidamente Boateng, que estaba al acecho, lo empujó hasta el fondo de la red para decretar el 2-1 definitivo.