vitoria. La Vuelta a Burgos, que arranca hoy en Villarcayo, contará con un corredor especial en la línea de salida: Mikel Astarloza. El ciclista de Pasaia correrá esta cita importante que precede a la Vuelta a España en las filas de Euskaltel-Euskadi tras haber cumplido los dos años de sanción después de que diera positivo por EPO en junio de 2009. "Hoy -por ayer- quiero comunicar que la Unión Ciclista Internacional me ha otorgado la licencia para poder volver a competir con el equipo Euskaltel-Euskadi", manifestó el corredor guipuzcoano en su página web (www.astarloza.com).
Durante los dos años en los que el corredor ha estado apartado de la alta competición, no ha dejado de entrenar a un alto nivel para volver a correr en las mejores condiciones. Su oportunidad ha llegado en la Vuelta a Burgos, donde Astarloza empieza "una nueva etapa con la ilusión del debutante y la experiencia del veterano, una nueva etapa que comienza donde hace dos años estaba: en casa, en Euskaltel - Euskadi" y depués de haber recibido muchas muestras de apoyo tal y como explicó en su página web: "Me siento un privilegiado y profundamente agradecido, tanto por las infinitas muestras de apoyo, como por la solidaridad que he recibido recibidas durante todo este tiempo".
Sin embargo, Astarloza no parará de luchar para demostrar la inocencia que viene defendiendo desde que fue conocida el positivo: " siempre he apoyado, apoyo y apoyaré todas las iniciativas que desde nuestras organizaciones locales y desde organismos internacionales se realicen para favorecer un deporte limpio y sin trampas", aclaró el ciclista en su página web. Esa lucha seguirá y demostrará su inocencia en la próxima vista ante el TAS el 15 o 16 de septiembre.
dos año de calvario Con la vuelta a la competición con el 'equipo naranja' con el que ha renovado por un año, Astarloza pone fin a dos años que comenzaron el 31 de julio de 2009 cuando la UCI anunció que el corredor había dado positivo por EPO en el test de orina que se le había realizado el 26 de junio. Esta noticia le llegó después de que hubiese logrado la victoria en la decimosexta etapa del Tour 2009 que concluyó en Boing Saint Maurice y de que terminara la ronda gala en la undécima posición de la general.
Astarloza, que ha proclamado su inocencia por activa y pasiva, convocó una rueda de prensa ante los medios de comunicación el 4 de agosto para expresar su inocencia: "He cumplido con escrupulosidad la normativa de localización de la UCI, comunicando mi paradero a diario. Si hubiera tomado algo que pudiera dar positivo, podría haber dado una dirección errónea o no responder a la solicitud de pasar el control, cosa que no ha ocurrido porque estoy completamente seguro de mi inocencia", comentó el corredor guipuzcoano en esa rueda de prensa a la vez que comunicó que había solicitado un contraanálisis.
Un mes más tarde, el 8 de septiembre, la UCI trasladó al ciclista el resultado de dicho contraanálisis donde volvía a dar positivo y donde el caso quedaba en manos de la RFEC (Real Federación Española de Ciclismo), que le sancionó por dos años hasta el 26 de junio de 2011. Además, la UCI le impuso una multa económica y le quitó la etapa del Tour 2009 y se la adjudicó a Sandy Casar.