El River Plate, el equipo con más títulos de Argentina, vive abocado a una auténtica pesadilla tras haber quedado a un paso del descenso de categoría y afrontar ahora la situación más grave en sus 110 años de historia. En su último partido, miles de hinchas rompieron en llanto e insultaron a los jugadores y al entrenador Juan José López, tras la derrota ante el Lanús (1-2) en el estadio Monumental. Un golpe que confirmó lo que todos temían: el equipo deberá jugar los dos partidos de la promoción con otro de la categoría B para mantenerse en la Primera División, a la que llegó en 1908. El peor promedio de puntos de la historia de un River desfigurado terminó de complicarse con siete partidos consecutivos sin victorias en el tramo final del torneo Clausura.

El River Plate, cuyo poderío deportivo e institucional derivó en su apelativo popular de "millonario", profundiza en el patetismo de su situación. Tras el partido con el Lanús, el técnico López canceló su habitual rueda de prensa y dispuso la concentración inmediata de la plantilla para afrontar los dos partidos ante el Belgrano, el primero en Córdoba el miércoles, y el segundo, en casa, el domingo. Fuera del estadio, la policía había reforzado la vigilancia ante la posibilidad de que los hinchas provocaran incidentes, pero la tristeza superó a la indignación y no hubo revueltas. Pese a todo, un hincha falleció tras sufrir una crisis cardíaca en el estadio. El fallecimiento del aficionado, de 68 años, se produjo en el hospital Pirovano, cercano al estadio riverplatense, al que llegó en grave estado tras sufrir un problema cardiaco en los graderíos. Mientras, en Córdoba, ciudad del centro del país que no tiene ningún equipo en la Primera División tras haber contado en esa categoría con importantes representantes como el propio Belgrano, Talleres, Instituto y Racing, esta alternativa ha provocado una conmoción. El Belgrano es un experto en promociones y reválidas. Ésta será la sexta ocasión en que protagonizará una fase de estas características desde que se impusieron en 1999.

Enfrente tendrá al peor River Plate de la historia y llega golpeado, sin ganar en siete partidos consecutivos y con los hinchas en llamas. Los diarios argentinos no daban crédito tras el encuentro. "Pánico en River", anuncia en su portada el Diario Popular. "Lo que nunca: River tendrá que jugar la Promoción para no descender", destaca también en su primera página el diario Clarín. "River, en riesgo como nunca", indica La Nación en uno de sus principales títulos. Al comenzar el año, el River solamente incorporó a su plantilla al delantero Fabián Bordagaray, suplente en el San Lorenzo. Llegó en calidad de cedido y jugó sólo algunos partidos. La situación económica del club impedía inversión alguna a causa de sus deudas millonarias.

Para afrontar la situación de crisis, la directiva confirmó a principios de este año en el cargo de entrenador a López, que había asumido el rol como interino en noviembre del año pasado ante la destitución de Ángel Cappa. No había dinero en la tesorería para el fichaje de un técnico de renombre y se apeló a un hombre de la casa. Con López en el banquillo el equipo jugó a la defensiva, generalmente con un solo punta, y en los últimos siete encuentros del Clausura sumó cuatro de 21 puntos posibles. López tiene ahora las horas contadas en su cargo y volverá a dirigir a los equipos juveniles del club, pero Passarella no busca todavía a un nuevo entrenador porque antes necesita saber si el equipo continuará en la Primera División o participará en el Nacional B en la temporada 2011-2012.