MADRID. El exciclista estadounidense Tyler Hamilton, que cumple oficialmente una suspensión por dopaje de ocho años aunque esté ya retirado, acaba de asegurar que vio a Lance Armstrong inyectarse EPO "más de una vez". En declaraciones al programa 60 minutos de la cadena CBS, Hamilton ha acusado al siete veces campeón del Tour de Francia, que fue su compañero en el equipo US Postal, de hacer "lo que hacían todos".
"Yo vi EPO en su nevera. Le vi inyectársela más de una vez, como hacíamos todos. Como hice yo muchas, muchas veces", afirmó sin ambages. "Armstrong tomaba lo que tomábamos todos, la mayoría del pelotón. Había EPO, testosterona, una transfusión sanguínea...". Hamilton se refirió en concreto a estas prácticas dopantes en los Tours de 1999, 2000 y 2001. Armstrong ganó el maillot amarillo de la ronda francesa ininterrupidamente entre 1999 y 2005.
Las declaraciones, de las que se ha conocido un extracto y que se emitirán de forma íntegra el próximo domingo, se unen a las ya formuladas el año pasado en el mismo sentido por Floyd Landis, otro compañero de equipo de Armstrong.
El heptacampeón del Tour, que nunca dio positivo en un control pero que está siendo investigado por las autoridades federales estadounidenses para averiguar si participó en programas de dopaje sistemático, ha puesto un mensaje en twitter en el que afirma: "+20 años de carrera. 500 controles en todo el mundo, dentro y fuera de competición. Nunca un positivo. Nada que añadir".
El abogado de Armstrong, Mark Fabiani, también negó la acusación y aseguró a Reuters que la intención de Hamilton es "hacer dinero escribiendo un libro. Ha cambiado completamente la historia que siempre contaba antes y con su participación en 60 minutos ha incrementado sus opciones con las editoriales. Pero el hambre de publicidad no puede cambiar los hechos: Lance Armstrong es el deportista más controlado en la historia del deporte", opinó.
Hamilton explicó que había decidido confesar después de que otro excompñero de equipo le hubiera señalado como culpable en un juicio. En su declaración ante la justicia, que se extendió durante seis horas, el exciclista contó "toda la verdad y nada más que la verdad. Sentí una sensación de alivio como no había sentido nunca", señaló.
Hamilton no es el primer excompañero que acusa a Armstrong de dopaje, ya que Floyd Landis también le señaló con el dedo tras cuatro años negando que se había dopado en el Tour de Francia 2006, donde logró una victoria que le fue retirada en beneficio de Pereiro.