DONOSTIA. La expedición de Edurne Pasaban se encuentra ya en el campo 4, a 7.950 metros, cada vez más cerca de la cumbre del Everest, tras un ascenso desde el campo 3 que los montañeros han realizado "cómodos y sin problemas".

Pablo Díaz-Munio, doctor de la expedición Desafío 14+1, explica en la página web de la alpinista que han establecido contacto con Pasaban por teléfono satélite, ya que la comunicación por radio "no está siendo posible".

Los montañeros han llamado tras haberse instalado en las tiendas, "ya comidos y bebidos", y han comentado que durante la subida han visto "mucha gente bajando".

Todos están bien, aunque el alpinista Asier Izagirre padece algunas molestias estomacales.

Ahora descansarán "lo posible" a la espera de ponerse en marcha para acometer "el ataque final" y poder hollar sin oxígeno la cumbre más alta del mundo.

Tal y como señalaban los pronósticos, ya ha comenzado a soplar el viento a esa altitud, señala Díaz-Munio.