Berlín. El Manchester United derrotó ayer con toda justicia a domicilio al Schalke 04 (0-2), en un partido en el que el equipo alemán tuvo que terminar agradecido de que la derrota no fuese más clara.

Esta vez, de Raúl González apenas hubo noticias. Los balones no le llegaban y el equipo que jugaba era el Manchester, que se mostró claramente superior desde el primer minuto, y si no se fue al descanso con una ventaja clara fue porque se encontró con una gran noche del meta del Schalke, Manuel Neuer.

Pero ni siquiera el recital de Neuer pudo evitar lo inevitable, que llegó en la segunda parte. El Schalke intentó, al comienzo, jugarle de igual a igual al Manchester, y en el minuto 67, Rooney metió un balón a Giggs que dejó solo en el área al galés, que no falló.

Tres minutos después, en una jugada casi calcada, Rooney hizo el segundo. Con ello, el partido se acabó, porque el Manchester United se dedicó a cerrar espacios atrás, ante un Schalke que poco tenía que ofrecer en lo ofensivo.

Al final, las estadísticas le daban un 66% de posesión de pelota a los visitantes. Y se podría creer que había sido más, a tenor de su clara superioridad.

SCHALKE 04 Neuer; Uchida, Matip, Metzelder, Sarpei (Escudero, 71); Papadopoulos, Farfán, Jurado (Draxler, 82), Baumjohann (Kluge, 53); Raúl y Edú.

MANCHESTER UNITED Van der Saar; Fabio, Vidic, Ferdinand, Evra; Carrick, Giggs; Valencia, Park (Scholes, 73); Rooney (Nani, 83); y Hernández (Banderson, 73).

Goles 0-1 min. 67: Giggs. 0-2 min. 70: Rooney.

Árbitro Carlos Velasco Carballo (España). amonestó a Metzelder, Sarpei y Fabio.

Estadio Veltnis Arena de Gelsenkirchen. 54.142 espectadores.