Jugar por cuarta vez consecutiva una semifinal de una Liga de Campeones es algo al alcance de los elegidos, ya que en la historia de la máxima competición continental es un objetivo que sólo han conseguido equipos de leyenda como el Real Madrid, el Inter de Milán y el Juventus de Turín. El último en hacerlo ha sido el Barcelona de Pep Guardiola tras su paseo triunfal en la eliminatoria ante el Shaktar.