Enviado especial madrid. El sueño de la séptima Copa del Rey de la historia, inviable para muchos antes de que se desataran las hostilidades en el Palacio de los Deportes, deberá aguardar para una mejor ocasión. Este Baskonia de trazos desconcertantes, lisiado por su fragilidad defensiva y en plena búsqueda de una identidad bien avanzada una temporada de amargos sinsabores constituyó una presa demasiado fácil para un rival inalcanzable hoy en día como el Barcelona. Apenas dos cuartos y medio, en concreto veinticinco minutos de ficticia igualdad, duró la esperanza de alcanzar una final que ya se vislumbraba como una bonita utopía antes del salto inicial. Y es que la tropa alavesa, desfondada a partir del minuto 25 (44-43) y víctima de los inagotables recursos de la trituradora blaugrana, apenas pudo dar réplica en una desnivelada antesala de la final. Se trataba de, como mínimo, competir para salir con la cabeza alta del torneo predilecto durante la última década, pero finalmente todos los objetivos saltaron por los aires y se esfumaron con una crueldad desgarradora. Sus titánicos esfuerzos para agarrarse a un fino hilo de vida contrastaron en todo momento con la abrumadora suficiencia de un rival que, tristemente, se halla a años luz. Quien pretenda ponerse una venda en los ojos, hacer la vista gorda, poner estériles excusas y no cerciorarse de esta terca realidad en que se ha convertido la dictadura del ogro catalán incurriría en un error de dimensiones gigantescas. Si ni la mejor versión azulgrana hubiera valido para tumbar a este molino de viento dirigido por Xavi Pascual, la actual inconsistencia terminó por deparar una descorazonadora derrota como la acaecida hace horas. Mientras el Caja Laboral demanda soluciones en la mayoría de las posiciones y acudió al combate con balas de fogueo, su oponente de otro planeta cabalga por esta ACB con armas de destrucción masiva y atesora puestos hasta por triplicado para imponer un ritmo asfixiante y minar paulatinamente la resistencia del más pintado. Los pupilos de Ivanovic se vieron atropellados y adolecieron de resuello en cuanto el vigente monarca continental dio una vuelta de tuerca a su defensa y recurrió a la desbordante magia de Navarro y Anderson. De ahí a la conclusión, el castigo resultó inapelable y de los que escuecen por el ejercicio de inferioridad. los peores presagios La gélida puesta en escena baskonista invitó a sacar el paraguas y contener un chaparrón en toda regla. Fueron unos aterradores diez minutos iniciales en los que la apisonadora catalana amenazó con acortar hasta la mínima expresión la historia de la segunda semifinal copera. Sería el preludio de lo que acontecería unos minutos más tarde. Si se mantuvo la incertidumbre fue, en parte, por la irrupción de Logan, cuyos 12 puntos sostuvieron en el segundo acto el endeble edificio baskonista. Superada esta primera devastadora oleada culé, pudo el duelo discurrir por unos mínimos cauces de igualdad. Ese tramo se convirtió en un duelo de pistoleros entre Navarro y el comunitario polaco. Ambos escoltas, que se defendieron mutuamente, destaparon el tarro de las esencias y se maltrataron con saña. A las diabluras de uno se sucedía la respuesta del otro, lo que redundó en un pulso dinámico y vistoso. La segunda línea de Ivanovic, donde también emergieron los fogonazos de Ribas y Bjelica, respondió con cierta entereza al interminable ejército de soldados blaugranas, pero el absentismo laboral de los pesos pesados representó una losa insalvable. A raíz de un tiro libre errado por Barac que impidió la igualada a 44, el Caja Laboral se desmoronó como un castillo de naipes. Pálido y sin rumbo, fue encajando golpe tras golpe hasta ver desfigurado su rostro. El escenario ideal para que los sobresalientes estiletes del Barcelona, encabezados por Navarro, paseran su talento. El primer título pasa de largo y los negros nubarrones continúan instalados alrededor del Buesa Arena en una temporada donde todavía quedan suficientes alicientes como para acreditar orgullo.

Segunda semifinal de la Copa del Rey. Palacio de los Deportes de la Comunidad. (13.045 espectadores)

Parciales: 21-11; 18-25-; 23-13; 30-24. Árbitros: Hierrezuelo, Redondo y Conde. Eliminados: No hubo.

PMinT2T3T1RTDOABRBPFV

8. Sada0140/3431111

9. Rubio10232/32/30/14431418

10. Lakovic 5

11. Navarro 26318/93/71/1322126

13. Perovic 11205/81/1853315

17. Vázquez482/41113

20. Ingles6131/11/11/229

21. Ndong4122/5221122

23. Morris 6182/3321119

25. Lorbek4222/30/432124

32.Anderson17245/81/34/46332220

44. Grimau4111/12/211143

TOTAL9220028/459/219/11322210145415110