Varias pintadas en la fachada del estadio de Riazor piden a los jugadores del Deportivo que respeten el escudo del club y advierten a aquellos que no tienen actitud de que lo mejor es que abandonen la entidad blanquiazul. Escritas en gallego, las pintadas llevan la firma de los Riazor Blues, el grupo radical de aficionados deportivistas, y pretenden concienciar a los jugadores para alejarse de las posiciones de descenso.