vitoria. Unai Albarado se quedó a un paso de conquistar el torneo élite de mano tras caer ante el vizcaíno Imanol Arrese por un ajustado 22-15. El pelotari de Zaramaga, pese a no partir con la vitola de favorito, a punto estuvo de dar la sorpresa. No en vano, el gasteiztarra aguantó lo indecible ante la pegada de su rival y tuvo la oportunidad de imponerse en el partido si la fatiga y un par de fallos en un par de pelotas fáciles no le hubiesen impedido disfrutar de ventajas más largas cuando dominaba el marcador 12-9.
Hasta ese momento, Unai, consciente de la fortaleza de su adversario se la jugó a restar sin bote para no perder distancia con respecto al frontis y meterse en los cuadros delanteros donde su remate podría decidir. Es ahí donde estaba su juego y no en el peloteo largo, donde Imanol Arrese mostraba su mayor pegada y resistencia.
Las ventajas hasta el tanto 12 se debían a buenos saques y mejores remates pero con Albarado al frente hasta el 15 iguales. Hasta ese momento el alavés lo había dado todo, entrando sin bote, da igual de derechas que de izquierdas, y sin importar la distancia al frontis. Eso requiere de mucha fuerza y vigor que al final se vieron minadas por un Arrese más poderoso y justo vencedor.
Unai se mostró satisfecho por su actuación valiente, sin perder nunca de cara la pelea y jugándosela donde la fortuna le exigía: en el remate y cuadros decisivos. Pasó pues la oportunidad en la final del Élite de Euskadi celebrado en la tarde noche del viernes en el frontón de Areta. Por último, en el partido para el tercer y cuarto puesto Armendáriz se impuso por 22-14 a Senperena.