amurrio. Un fatal error de un controlador, que desvió y sacó fuera del circuito al grupo de atletas en cabeza, impidió una buena marca pero no la victoria de Elijah Karanja en los 10 kilómetros de Amurrio.

El keniano se impuso por la mínima a su compatriota Evans Mayoyo y al zimbabuo Cuthbert Nyasango en un cerrado sprint después que un lamentable fallo humano anulara el intento de bajar de 29 minutos en los 10.000 metros en ruta homologados por la RFEA.

Cuando Karanja tenía unos 10 segundos de ventaja sobre Barnabas Segei, a unos 500 metros del final, un controlador de la carrera que erró en su misión mandó a los corredores de cabeza por una vía equivocada. Los atletas, advertidos, rehicieron 320 metros para volver el circuito homologado, lo que impidió que el líder concluyera en un tiempo previsto de 28:50-28:55 conforme a los ritmos hechos con anterioridad.

El primer kilómetro fue cubierto en 2:49, el km.3 se pasó en 8:51, el 5 en 14:20 y el 8 en 22:54 por Karanja, con dos segundos de ventaja sobre Segei. Hasta el km.9 el promedio fue de 2 minutos 51 segundos el kilómetro. Tras el fuerte repecho del km.8 se llegó al km.9 en 25:56. Los últimos 1.000 metros en 3 minutos 48 segundos, lo que da idea del desastre deportivo producido por la negligencia. La carrera fue muy bonita y siempre mandada por los africanos. Hillary Yego, ganador de los 10 Kms. de Madrid (Carrera del Consejo Superior de Investigaciones Científicas), sólo dio la talla en la parte final del recorrido. Segei, destinado a ser segundo y finalmente quinto, fue el más perjudicado por el desvío.

Notable actuación del alavés Gontzal Sanz, que en un bravo final ocupó la octava posición de este Gran Premio Tubos Reunidos, siendo a la vez primer atleta blanco.

En la categoría femenina, producidas las bajas de la etíope Marta Tigabea por una gastroenteritis y de Raquel Llamas, por razones no explicadas, el triunfo de Beatrice Toroitich, de Kenya (33:51), fue esperado y justo.