Bruselas. Los 800 metros, con el reciente plusmarquista mundial David Rudisha en categoría masculina y con la controvertida Caster Semenya en la femenina, comparten protagonismo en Bruselas con los 100 metros, en los que el estadounidense Tyson Gay aspira a batir su mejor marca.
Las bajas por lesión de Usain Bolt y de Asafa Powell han dejado solo a Gay en el cierre de la Diamond League, que se esperaba como la gran cita de la velocidad de esta temporada. Sin sus dos grandes rivales, el estadounidense -que llega invicto este año y tiene en su poder la mejor marca de la temporada (9.78)- espera aprovechar su gran estado de forma para llevarse la victoria en la clasificación final y para rebajar ese tiempo.
La otra gran atracción de la tarde serán los 800 metros, tanto en categoría masculina como femenina. En hombres, el keniano David Rudisha competirá por primera vez tras batir el pasado domingo en Berlín el récord del mundo instaurado por Wilson Kipketer en 1997.
Rudisha encabeza la clasificación de la Diamond League y tendrá como principal rival al sudanés Abubaker Kaki, campeón mundial en pista cubierta. A priori, la carrera será más lenta que en Berlín, pues Rudisha no tiene intención de atacar el récord, algo que sí podría hacer el domingo en Rieti.
En el 800 femenino varias corredoras con la keniana Janeth Jepkosgei a la cabeza llegan con posibilidades de llevarse el trofeo de los diamantes, aunque la gran atracción será la sudafricana Caster Semenya. La joven atleta tratará de correr por debajo de los 2 minutos, tal y como hizo en su regreso a la alta competición.
