MIAMI (ESTADOS UNIDOS). El tenista español Rafael Nadal no pudo acceder a la final deltorneo de Miami, segundo Masters 1000 de la temporada, tras caereliminado ante el estadounidense Andy Roddick, que se impuso en tressets (4-6, 6-3 y 6-3) en un partido donde el manacorí ofreció dos caras.

Roddick, que fue de menos a más, apartó a Nadal de la que hubierasido su tercera final en Miami y jugará la final ante el checo TomasBerdych. El balear sufrió en exceso el potente saque del jugador deNebraska (15 'aces') y volvió a perder en unas semifinales por segundasemana consecutiva tras su derrota en Indian Wells.

El norteamericano estuvo soberbio y apenas concedió opciones altenista español a partir del segundo acto. Hasta entonces, Nadal teníatodo bajo control y compensaba el servicio de Roddick desde el fondo dela pista. El número cuatro del mundo comenzó con fuerzas y conscientede que cualquier error 'metería' en el partido a su rival.

El insular, que había ofrecido un alto nivel ante Tsonga, certificópronto la primera ruptura del choque, en el tercer juego, y consolidóel 'break' a continuación. A partir de ahí, el set fue sobre ruedas ymantuvo su servicio para cerrar la primera batalla de la contienda alsegundo punto de set (6-4).

Con todo a su favor, la segunda manga instaló a Nadal en el partidocon algún punto memorable, pero Roddick apretó para calibrar el nivelemocional del español, que desde hace tiempo es sinuoso, muyserpenteante. Obligado por jugar una nueva final, Nadal pagó caro sufalta de concentracón.

Unido a la fortaleza del americano, que añadió munición a su yaconocido cañón, Nadal cedió su saque por primera vez en el partido aldecimoctavo juego. El balear había guardado un botín por mucho tiempo,pero Roddick, con el 5-3 a favor, sentenció el segundo set al siguientesaque (6-3).

Sin dejar fisuras en su juego y apostando por la fórmula del 'saquey volea', Roddick obligaba a Nadal a restar con sufrimiento. Por aquelentonces el español, que pasará el lunes al número tres del circuito,ya no era el mismo y clamaba al cielo por una reacción que no llegaba.

RODDICK NO DA OPCIONES.

Y así pasó. El jugador de Nebraska, aupado por el público, volvió aromper el saque de Nadal en el tercer juego del último acto (1-2) yaguardó los errores de su oponente. Roddick vencía de forma fácil susjuegos y Nadal evidenciaba un lastre, provocado más bien por el buenhacer del muro que tenía enfrente que por su propio tenis.

El último set concedió algún respiro al mallorquín y tras unintercambio razonable de juegos, a punto estuvo de lograr la proeza conel 4-3 a favor del jugador local. La ventaja sobre el set del americanoacabó en nada y para más inri, Roddick ganó la partida a Nadal en elsiguiente servicio.

El norteamericano, con un altísimo nivel de juego, dejó en el caminoa un Nadal que no termina de dar en la tecla y que cae por primera vezen semifinales del torneo de Miami tras las dos que disputó en 2005 y2008. Roddick se apuntó su tercera victoria sobre el manacorí en untotal de ocho enfrentamientos, todas sobre pista dura. Nadal cuenta lashoras para pisar el polvo de ladrillo.

En la otra semifinal, el checo Tomas Berdych se deshizo sin apuros(6-2 y 6-2) del sueco Robin Soderling en un partido que duro apenas unahora y donde Berdych demostró el gran momento de forma que atraviesahabiendo dejado por el camino a Roger Federer o Fernando Verdasco.

El checo, que llegó a desquiciar a Soderling con un enormerepertorio de derechazos, busca así su segundo título de la serieMasters 1000 después del conseguido en París en 2005.

En cuanto a los enfrentamientos entre ambos, el de Nebraska partecon un balance favorable de 5-2 llevándose las tres victorias en lasúltimas veces que se han enfrentado, dos de ellas esta misma temporadaen el Torneo de Brisbane y en el de San José.