dublín. Alemayehu Bezabeh, un atleta de 23 años nacido en Etiopía, se convirtió ayer en el primer español que conquista el título masculino de campeona de Europa de cross, y la barcelonesa Rosa Morató redondeó el éxito español en Dublín con la plata en la carrera femenina.

Juan Carlos de la Ossa (tres veces), Alberto García y Alejandro Gómez habían logrado medallas de plata, pero ningún español había pesado el cajón más alto del podio en las 15 ediciones anteriores.

Bezabeh, segundo en el cross de Atapuerca plantando cara al campeón mundial, el etíope Gebre Gebremariam, y vencedor en Quintanar, venía anunciando un gran momento de forma que ha plasmado en Dublín con una victoria impecable en cerrada pugna con el británico de origen somalí Mo Farah, mientras que el ucraniano Lebid, el gran dominador con ocho títulos, no tuvo más remedio que claudicar ante el español y acabó tercero.

Dos años después de que Marta Domínguez obtuviera en Toro (Zamora) el primer título continental de cross para España, Bezabeh ha confirmado su progresión batiendo por 17 segundos a Farah y por 42 a Lebid. La carrera respondió a las expectativas. Mo Farah, que se había entrenado también en la altitud de Addis Abeba, marcó la pauta en los primeros kilómetros, con Bezabeh y Lebid a su lado. Mediada la prueba Farah y Bezabeh se habían quedado ya solos en cabeza, diez segundos por delante de Lebid.

La ventaja de los dos fugados fue aumentando y a tres kilómetros del final, Lebid, quince segundos por detrás, ya podía dar por perdida toda opción a ganar el noveno título. Bezabeh, que el año pasado en Bruselas hubo de resignarse al séptimo puesto después de haber salido a todos los ataques, aprovechó la lección y esta vez fue él quien, una vez que se quedó solo con Farah, le atacó sin complejos en los dos últimos kilómetros hasta dejarlo irremisiblemente atrás.

El cuarto puesto de Sergio Sánchez y el quinto de Ayad Landassem permitieron a España revalidar su título por equipos, por delante de Gran Bretaña e Italia.

En categoría femenina, Rosa Morató consiguió la medalla de plata dos años después de haber subido por primera vez al podio, al ser tercera en Toro (Zamora), cuando fue campeona Marta Domínguez. La victoria fue para la británica Hayley Yelling, campeona en 2004, que marcó el ritmo desde el primer momento y no cedió hasta la meta. El atletismo español completó el éxito con la medalla de bronce por equipos, por detrás de Portugal y Gran Bretaña.

IVÁN FERNÁNDEZ, EL 22 La categoría sub 23 situó tercero a un belga de ilustre apellido: Atelaw Bekele, nacido en Etiopía y residente en Bélgica desde los 16 años. Le derrotaron dos franceses de origen magrebí: Smail y Chahdi. El mejor español fue Daniel Mateo, entrenado por Abel Antón, que terminó 14º, mientras que el alavés Iván Fernández, entrenado por Fiz, concluyó en el puesto 22. Por equipos, España se quedó a las puertas del podio, cuarta.