Vitoria. La medalla está al alcance de España. Así lo ve la extremo alavesa del Itxako, que afronta con la máxima ilusión el Mundial de China que se disputa desde el próximo 5 al 20 de diciembre. El buen ambiente del grupo y el excelente trabajo realizado por la selección española lleva a pensar a la jugadora alavesa que pese a la calidad de sus rivales, no es imposible.

El inicio de temporada, salvo en Europa, está siendo espectacular. Campeonas de la Supercopa, líderes en Liga. ¿Qué más se puede pedir?

Pues sí. Hemos empezado muy bien y gracias a todo lo que conseguimos la temporada pasada, hemos conseguido jugar la Champions este año y estamos ahí arriba, líderes, y muy contentas por ello.

¿Les ha sorprendido el dominio que está teniendo Itxako en las competiciones domésticas?

No. El equipo ha ido creciendo. Creo que empezó hace ocho temporadas en División de Honor y poco a poco ha ido subiendo, reforzándose con jugadoras de nivel, por lo que no nos sorprende. Ahora mismo creo que tenemos cinco o seis jugadoras en el equipo nacional, por eso, es normal que el equipo esté arriba.

¿Qué les está pasando en el torneo continental para estar casi desahuciadas?

Es una competición muy dura y encima nos ha tocado un grupo muy complicado. Están tres equipos muy fuertes, que prácticamente son las selecciones de sus países y selecciones fuertes además. También es el primer año para el equipo en la Champions. Es todo nuevo, hay más desgaste entre la Liga y esta competición y eso se acusa.

¿Están pagando la novatada?

Sí. Hemos estado ahí muchos partidos a punto de ganarlos, pero que los pierdes de dos, de uno y te quedas con ese sabor amargo, pero bueno hay que ir poco a poco. Sabemos que nos falta algo de experiencia en este torneo. Todo es nuevo y ahora te das cuenta de lo duro que es todo esto.

Ahora les llega un cambio de tercio y dejan su club para pelear por la selección española. ¿Se nota el cambio?

Sí, claro que se nota, ya que no tiene nada que ver lo que hay a nivel de selecciones con los clubes. Es diferente, pero ilusionante a la vez.

¿Qué tal es el grupo humano que se encuentra con España?

Muy bueno. Estamos un pequeño grupo de veteranas y mucha gente joven y entonces se nota mucho la mentalidad, las ganas, el quererlo hacer bien, el ganar y la ilusión que tienen. Eso es necesario para que luego los resultados acompañen.

¿Diría que existe un ambiente similar al de su club?

Sí. Además, creo que el buen ambiente es primordial para lograr resultados. Nuestro entrenador también se ocupa mucho de que eso fluya como tiene que fluir porque es muy importante que en el vestuario esté la cosa bien para que luego fuera funcione todo en el campo.

Por el modo en que celebran los títulos en su equipo da la sensación de que son una piña y hay muy buena sintonía entre todas como si fueran amigas de toda la vida. ¿Es así?

Sí. Luego siempre tienes más relación con unas que con otras, pero somos compañeras, ante todo estamos todas para conseguir lo mismo y siempre unidas hasta el final.

¿Esta unión será clave para estar temporada tras temporada peleando por los títulos?

Claro. Si no tuviéramos buen ambiente, esto sería una casa de locos. Pasamos muchísimo tiempo juntas entre viajes, entrenamientos, vídeos y actos sociales, estamos mucho tiempo juntos y quieras o no, las relaciones se afianzan y siempre terminas con un montón de amigos, además de compañeros en los equipos por los que has estado.

En el Itxako además tiene el apoyo de su hermana Patri. ¿Ayuda eso a superar malos momentos?

Eso es un privilegio que no tenemos más que ella y yo y claro que ayuda porque al final te conoce mucho y es tu hermana y sabes que va a estar ahí para lo que sea. Para lo bueno, para lo malo y para todo.

Lástima que no le pueda acompañar a este Mundial. ¿La va a echar de menos?

Claro. Mucho. Me encantaría que estuviera aquí, pero bueno. Estas cosas son así y la temporada pasada cuando quedamos subcampeonas, pues la primera persona de la que me acordé fue ella. Ella ha estado mucho tiempo aquí en el equipo nacional y es algo que te da pena. Todo la gente que ha estado y luego por los motivos que sean deja de estar, pues si consigues algo te acuerdas de todos ellos.

España logró hace un año la plata en el Europeo de Macedonia. ¿Ir a por el oro y más estando Noruega de por medio es una quimera?

Imposible no, pero sí que es cierto que es una selección muy fuerte. Pero bueno, después de la plata del año pasado, miedo ya no nos da nada. Fuimos partido a partido y sin creérnoslo estábamos en la final, por lo que miedo no tenemos a nada. Vamos a plantar cara todo lo que podamos, pelear y todo lo que venga bienvenido será.

¿Revalidar la plata es un objetivo muy ambicioso o está al alcance?

Está al alcance perfectamente. Al alcance bueno, a base de mucho trabajo y de mucho esfuerzo como el año pasado. Pero está claro que si hemos llegado hasta ahí, por qué no vamos a poder repetirlo otra vez.

¿Quiénes serán sus principales rivales por las medallas?

Siempre se habla de las mismas selecciones. Noruega, por supuesto será de las más fuertes, Rumanía, Rusia, Alemania, Dinamarca, Hungría también... Y nosotras. Igual antes no se hablaba de nosotras, pero a partir del año pasado a lo mejor eh, España también. Je, je.

¿Se le hace duro estar tantos días fuera de casa?

Sí. Ya vienes con la mentalidad de que vas a estar un mes, mes y medio fuera, pero se hace duro. Cuando estás con tu gente todo es mejor.

Al menos, cuando termine este Europeo disfrutará de unos diez días de vacaciones con los suyos en Amurrio. Eso motivará.

Sí, cuando acabe el Europeo nos plantamos en las Navidades, que es tiempo de estar con la familia, los amigos y para descansar.