Es larga la lista de escenarios conquistados tanto por estos lares como en diferentes países, también al otro lado del Atlántico. Soziedad Alkoholika lleva siendo mucho tiempo un referente indiscutible más allá del thrash, el hardcore, el metal y el punk. Ni siquiera los dos años de parón obligado por la situación sanitaria -son de los que no han querido volver a actuar hasta que se pudiera hacer casi como antes- han mermado uno de los directos más potentes y arrasadores que se pueden ver en estos momentos. Todo lo contrario.

En 2023, aunque la banda no es nada amiga de aniversarios y esas cosas, se cumplirán 35 años desde que SA se puso en marcha. Casi nada. Juan (voz) y Jimmy (guitarra) han vivido cada día de esos tres decenios y medio. El último en llegar fue Alfred (batería), que tomó el relevo de Roberto Castresana, que tuvo que dejar el grupo por una lesión en los tendones de su hombro derecho que le impedían seguir en la banda que él también ayudó a fundar en 1988. Junto a ellos están Pirulo (bajo) e Iñigo (guitarra), dos veteranos que se sumaron a la senda en 1996 y 2009 respectivamente.

Hoy que casi no se venden discos puede parecer inservible el dato, pero lo cierto es que los gasteiztarras han vendido casi 500.000 copias de sus diferentes referencias. Se dice pronto. El último trabajo fue En bruto XIX, un álbum con audio y vídeo que recoge un concierto ofrecido en 2018 en el festival Leyendas del Rock. No en vano, sin quitar ni una sola coma a su labor en el estudio -además contando con un Jimmy cuya faz de productor es más que apreciada-, es en el directo donde el quinteto rompe todos los esquemas.

Se podrá comprobar así en un Azkena Rock Festival que, ahora que cumple 20 años desde que en 2002 se llevó a cabo por primera vez en la sala del mismo nombre ubicada en la calle Coronación, ha querido que SA compartiera esta celebración. Más de uno estará a buen seguro pensando que si el concierto se parece lo más mínimo a la brutalidad de actuación que se pudo ver hace unas semanas en el polideportivo de Mendizorroza, el éxito está garantizado.

Ratas, Automarginado, Nos vimos en Berlín, S.H.A.K.T.A.L.E., Palomas y buitres, Polvo en los ojos, Civilización degeneración, Jaulas de tierra, Cuando nada vale nada, Pauso bat, Piedra contra tijera, Niebla de guerra, Sistema antisocial, Peces mutantes y muchas más canciones conforman una trayectoria imposible de igualar. La influencia musical de los alaveses además en otros grupos es innegable. Hace bien poco, por ejemplo, una veintena de bandas de Asturias se han unido para hacer el disco homenaje Intoxicación Asturika.

Todo eso se ha conseguido también a pesar de la censura, el boicot y los intentos de acallar a la banda por vía judicial. Porque de eso también ha habido y no poco. Pero ya se sabe que mala hierba nunca muere. Y hace falta mucho más para acallar a quien no tiene ninguna intención de morderse la lengua. Así que el 17 de junio en Mendizabala tocar gritar con Juan: ¡brea!