Un año más la Llanada Alavesa se vuelve a llenar de música clásica de la mano del Ensemble Albéniz. Lautadako Musika Jaialdia recorrerá seis pueblos de los municipios de Asparrena, San Millán y Elburgo.

Lo que empezó como una "minigira", ahora es una cita muy esperada en los pueblos de Álava

El festival se lleva celebrando desde 2008 con el objetivo de "acercar la música en pequeño formato a los pueblos y a la gente que no tiene fácil acceso". Este año, el ciclo de verano tendrá un total de siete conciertos entre los días 18 y 27 de julio.

El ciclo, que se lleva a cabo en las iglesias de los pueblos, se divide en tres partes, cada una de dos o tres conciertos: En la primera parte, que tendrá lugar en los pueblos de Argómaniz e Ilarduia, se interpretará música de los compositores y músicos Mozart, Händel y Rolla. Los pueblos de Amézaga y Albéniz podrán disfrutar de la música de Beethoven, Händel, Rolla y por último, en Galarreta, Araia y en el segundo concierto en Albéniz sonará música barroca para viento y cuerda.

La inauguración será el jueves 18 de julio en la iglesia San Andrés de Argómaniz a las 19.00 horas, el concierto incluirá una visita guiada la iglesia. A partir de entonces, los músicos pasarán por Ilarduia (viernes 19 a las 20.00 horas), Amézaga (sábado 20 a las 20.00); en el pueblo de Albéniz se llevarán a cabo dos conciertos los días 21 y 25 a las 20.00 horas los dos; y los dos últimos conciertos serán en Galarreta (viernes 26 a las 20.00) y Araia (sábado 27 de julio a las 19.30).

Lautadako Musika Jaialdia 2024

Lautadako Musika Jaialdia 2024 Becario Edición Digital

Ensemble Albéniz

Este ensemble catalano‐vasco combina cuerdas con instrumentos de viento madera como la flauta, el clarinete y el oboe. Está compuesto por los músicos Guillem Calvo Martínez de Albéniz, violín y director del festival, Ricardo Cuende, violín y viola, Leire Moreno, viola, Alberto Ferrés, violonchelo, Mikel Albistur, oboe, Marta Santamaría, flauta y piccolo e Iñaki Iraola, fagot.

Músicos del Ensemble Albéniz Cedida

Lautadako Musika Jaialdia

El festival se lleva celebrando desde 2008 con el objetivo de "acercar la música en pequeño formato a los pueblos y a la gente que no tiene fácil acceso"

Este ciclo de verano, que este año celebrará su decimocuarta edición (a causa de la pandemia hubo un parón de dos años en 2020 y 2021) , se celebra durante la segunda mitad de julio y agosto. Apuesta por un público amplio, en su mayor parte formado por los habitantes de la Llanada Alavesa, gente que en su gran mayoría tiene difícil acceso a la música clásica en directo. A este público se suman personas que veranean en estos pueblos e incluso que han acudido a los conciertos de lugares más lejanos. Para todos ellos está dirigido este ciclo de conciertos de pequeño formato en las iglesias de los pueblos de la Lautada.

Las iglesias de los pueblos donde se celebran los conciertos del festival tienen una acústica ideal para la música de cámara y un aforo muy conveniente para este tipo de conciertos; lo suficientemente grandes para acoger a toda la gente que acude y lo suficientemente recogidas para dar una sensación de intimidad necesaria para la música que se interpreta. Este nuevo ciclo musical representa una actividad cultural diferente para las iglesias y la comunidad de dichos pueblos.

Lo que empezó en 2008 como Asparrena Musiketan, con conciertos en Gordoa, Albéniz, Andoin, Araia, Ilarduia, Ametzaga y Arriola, se conviritió en Lautada Musiketan: Asparrena & Barrundia ampliado la oferta en pueblos como Larrea, Marieta, Mendixur, Heredia u Ozaeta. A día de hoy, Lautadako Musika Jaialdia recorre varios municipios de Álava.

Dirección artística

El festival comenzó con la idea de dar conciertos a familiares y amigos en los pueblos de Asparrena, donde el músico Guillem Calvo Martínez de Albéniz tiene raíces, en concreto en el pueblo de Álbeniz.

Guillem Calvo Martínez de Albéniz Cedida

Lo que empezó como una "minigira", ahora es una cita muy esperada en los pueblos de Álava, donde residen muchas personas aficionadas a la música clásica que el resto del año no tienen tan fácil disfrutar de ella.