Mientras Entropía sigue con la gira de presentación de Eclipses (Clostridium Records) dentro y fuera del País Vasco –con planes, además, de volver a actuar en el extranjero– Jon Bellido (teclados y voz), Roberto Nieves (guitarra y voz), Lasto (bajo) y Andoni Penela (batería) se reencuentran dentro de unos días con el público de casa. Lo hacen, eso sí, en el marzo del Azkena Rock Festival. El grupo gasteiztarra será el primero en actuar el sábado.

¿Cómo se toma el grupo la actuación en un festival de este tipo? 

–La verdad es que nos lo tomamos como cualquier otro concierto. Todas las actuaciones, signifiquen tocar en un escenario grande o en un club delante de diez personas, son iguales para nosotros. Vamos con la idea de presentar el álbum, hacerlo lo mejor posible y disfrutar de esa experiencia. Pero tenemos claro que es un concierto más, como puede ser tocar en cualquier sala o lugar.

“La idea es intentar dar un show que la gente que esté disfrute, que sea una experiencia guay para quien vaya tan pronto al ARF”

Les toca abrir el sábado, en un concierto que más o menos durará una media hora. 

–Eso es. Vamos a presentar el álbum e intentar dar un directo bueno sabiendo que, seguramente, a esa hora no habrá gran afluencia de público. La idea es intentar dar un show que la gente que esté dentro disfrute, que sea una experiencia guay para la gente que vaya tan pronto. Es como corresponderle, de alguna manera, al público fiel que acuda en ese momento.

Habrá muchas personas cercanas, pero también gente de fuera –aunque el grupo ha tocado bastante en otros puntos de la península– que se encuentre con Entropía por primera vez. 

–Es gente a la que tenemos ganas de llegar para que conozca nuestra música y puesta en escena. Se trata de transmitir, de enseñar a quien no nos haya escuchado nunca un poco de lo que hacemos y que el personal se lleve una buena experiencia de todo lo que hagamos.

Roberto Nieves (guitarra y voz) y Lasto (bajo) en local de ensayos de Entropía Josu Chavarri Erralde

Actuar a primera hora del sábado, significa ser formales el viernes... 

–(Risas) Sí... bueno, haremos lo que podamos. Tenemos ganas de ver a Queens of Stone Age. Sobre todo sus primeros álbumes nos gustan bastante. Y hay algunas bandas en el festival que tenemos ganas de ver, que son también influencia, como Psychedelic Porn CrumpetsAll Them Witches e incluso Ty Segall. Intentaremos disfrutar del festival.

“Con ‘Invisible’, el anterior disco, ya tocamos en Francia y la idea es, de cara a 2025, llevar a cabo una gira fuera con ‘Eclipses”

‘Eclipses’ se publico el pasado septiembre. ¿Qué sensaciones les está dejando el disco después de estos meses de recorrido? 

–Sensaciones positivas, la verdad. Es un álbum que costó sacar adelante, primero por el contexto pandémico. Luego también hubo retrasos con la producción física del formato vinilo y CD por toda la crisis sanitaria. Pero una vez publicado, ha sido como una vuelta a la normalidad en el sentido de poder presentarlo en directo. Además, el tener la suerte de poder contar con un sello alemán como Clostridium Records nos ha llevado a que el disco se distribuya por Europa. Eso ha supuesto que con este álbum hemos llegado a más gente en otros países. Al final, hemos ido viendo que nuestro estilo de música funciona bastante bien, e incluso en ocasiones mejor, en países de Europa que por aquí. Así que, en ese sentido, estamos bastante contentos

El del ARF no es el primer concierto en Vitoria con este disco, pero casi. 

–Sí. En diciembre, tocamos dos días seguidas en el Kitsch. Fue algo para un aforo reducido, contando con invitados como Dr. Sax. Montamos un sarao algo más íntimo. Y ahora volvemos. En este tiempo hemos tenido la oportunidad de sacarlo fuera. Hemos estado en Madrid, por ejemplo, y tenemos pendiente ir a Zaragoza y Barcelona. Además, hay ganas de acudir a Andalucía. Pero bueno, poco a poco.

Camino internacional

La presencia del sello alemán y el recorrido que está teniendo el disco en otros países, ¿invita a pensar en una gira fuera? 

–Es nuestra idea. Tenemos esa intención. Lo que pasa es que hay que cuadrar entre los cuatro del grupo las agendas para organizarlo todo bien. Pero sí queremos salir a tocarlo por Europa. Ya lo hicimos con Invisible, el anterior disco, en Francia y la idea es, de cara a 2025, llevar a cabo una gira fuera. 

Andoni Penela (batería) en el local de ensayos de Entropía Josu Chavarri Erralde

Eso ya llegará, seguro, pero lo cierto es que en este 2024, Entropía cumple diez años de camino, que se dice pronto. ¿Un cumpleaños feliz o...?

–Sí, sí, y tanto (risas). Lo comentábamos los cuatro hace poco. Nos estuvimos acordando de los primeros ensayos que hacíamos en verano de 2014 y de todo el recorrido que hemos tenido desde entonces. Hemos visto cómo hemos crecido como banda. Mantenemos la misma formación original y somos como hermanos. Tenemos infinidad de anécdotas en común. También, por supuesto, hemos ido viendo cómo hemos crecido como personas hasta llegar aquí. Y hoy creo que podemos decir que estamos en un buen momento. Además, con muchas ganas de tocar. Seguimos componiendo, ensayando cada semana, y activos.

“A quienes están empezando les diría que disfruten de lo más banal, que es quedar en el local con tus compañeros de grupo y crear”

Lo directo con Entropía sería hablar de rock psicodélico, pero más allá de etiquetas puestas por medios de comunicación, ¿cómo definiría el sello de la banda? 

–Creo que es una música con bastantes contrastes y bañada con una atmósfera. Tiene una base rítmica importante que suele jugar a veces con los cambios de tiempo, con bases quizá no muy comunes. Todo eso bañado con una atmósfera que, sí, podríamos llamar psicodélica. A partir de ahí, una guitarra principal y voces que muchas veces van a coros, haciendo armonías. Tampoco nos gusta encerrarnos en un estilo. La música, al final, da muchas vueltas y acotar este tipo de cosas puede llegar a ser contraproducente. Con todo, sí que podemos hablar de que nuestra música está en el universo del rock psicodélico, del rock progresivo, del stoner...

Es hacer un camino que en la escena vasca y estatal tampoco está tan transitado. 

–Bueno, ya ha habido bandas. Mira, en este sentido, Vitoria ha tenido una tradición interesante en el underground con bandas como Arenna, grupos que además han podido salir al extranjero. Ahí tienes a formaciones como Buridan que mantienen ese sello o esa esencia desde la escena. Es verdad que es una escena que, a nivel estatal, no pasa por su mejor momento. Pero creo que los que estamos, tenemos que apoyarnos e intentar sacar adelante cosas como ya se está haciendo. Al final, es una música que está en el underground y que está activa. Lo importante es que no se pare, que no desaparezcan grupos. En este sentido, es verdad que la pandemia hizo bastante mella. Bueno, como pasó en todos los estilos de música. Nosotros sí notamos que muchas bandas amigas lo dejaron al no poder ensayar y tocar. Eso todavía se arrastra un poco y se nota en la escena. Así que lo importante es seguir activos en este sentido y darse cuenta de que hay cosas muy interesantes. Hay que investigar a veces un poco por los escenarios y por Internet, porque se descubren cosas muy chulas. 

Los inicios

Por cierto, ¿cómo se junta Entropía hace diez años? 

–Cuando estaba en el instituto conocí a Lasto. Íbamos al mismo centro, Samaniego. De adolescentes, quedábamos para ensayar. En un momento dado vimos que los temas que íbamos haciendo, estaría bien probarlos en un formato de banda. Él conocía a Rober y a Adoni, así que nos juntamos un día que, si no recuerdo mal, era en fiestas de Vitoria. Fue una tarde de ir a local a mear un poquillo, a improvisar y ver qué pasa. A partir de ahí, seguimos quedando. A todos nos motivaba el proyecto. Vimos que había muy buena química, que nos entendíamos muy bien, no solo musicalmente, también en lo personal. Así que fuimos quedando más, creando canciones y ahí seguimos.

Es una banda, por así decirlo, rara en este sentido porque no es muy habitual que durante diez años no haya habido ni un solo cambio dentro de la formación. 

–Sí. Es algo que nos diferencia y que, sin querer, lo transmitimos. Tenemos muy buena relación entre todos, somos amigos, llevamos muchos años compartiendo cosas, escuchándonos, sabiendo, en las partes en las que improvisamos en directo, por dónde va a tirar cada cual. Además, tenemos claro que queremos que siga siendo así. Seguiremos juntos hasta que se pueda.

Jon Bellido (teclados y voz) en los locales de ensayo de Entropía Josu Chavarri Erralde

Pero hay que mantener una banda mientras las vidas personales y profesionales van exigiendo también su protagonismo. 

–A veces no es fácil. Nos tenemos que organizar en horarios en los que a veces estamos cansados porque llevamos todo el día trabajando, por ejemplo. O hay que sacar huecos libres desde lugares complicados. Pero eso también nos hace fuertes y nos refuerza en la idea del proyecto. Además, puedes ir con cierta pereza o cansancio al local, pero cuando te pones a tocar, ves que todo merece la pena. Creo que poder compaginarlo todo nos hace fuertes como grupo, aunque muchas veces no sea sencillo por las circunstancias vitales de cada uno. Es cierto, de todos modos, que con el paso del tiempo vas aprendiendo a organizarte.

Si hoy cuatro chicos de instituto quieren formar una banda, les aconsejaría... 

–Les diría que, sobre todo, intenten disfrutar, que no se metan en la cabeza ideas de triunfo y de llegar a no sé qué nivel. Que disfruten de lo más banal, que es quedar en el local con tus compañeros de grupo y crear desde la base, que es donde surge la magia y donde está lo importante. Actuar en no sé dónde o sacar un álbum son cosas que están genial, pero lo maravilloso es tocar con gente y crear en común.

¿Habrá alguna celebración interna de estos diez años? 

–Lo estamos hablando aún. Interna sí, pero estamos mirando si podemos hacer algo especial por los diez años en este 2024.