Salir de los escenarios habituales de la Banda Municipal de Música de Vitoria para compartir programas especiales en los que también se aprovecha para tener una relación distinta con el público. En pocas palabras, se ha puesto en marcha en los últimos años un ciclo de actuaciones otoñales de carácter gratuito que en este mes de octubre va a llegar tanto al centro cívico Ibaiondo como al Conservatorio Jesús Guridi.
Este miércoles 4 se producirá la primera cita, que como el resto empezará a las 19.30 horas. Será en el escenario del Félix Petite (Ibaiondo) donde la centenaria agrupación, bajo la batuta de su director adjunto Iker Olazábal, ofrecerá el programa bautizado como Caprichos de sonido. En este caso, se quiere viajar con los presentes por "sonidos diferentes, no habituales" y para ello se contará con obras como The Bermuda Mystery de Wouter Lenaerts y The island of light. The Giants de José Alberto Pina.
Ya el día 11 se repetirá escenario y horario para, de nuevo con Olazábal al frente, compartir música relacionada con el cine de animación y los vídeojuegos. Para ellos se han seleccionado piezas de creaciones como Lilo & Stitch, Los Increíbles y Super Mario Bros, entre otros títulos. Como sucederá en todos los recitales, se darán explicaciones a los espectadores sobre las razones de cada programa y sobre las obras seleccionadas, qué papel e importancia tienen.
Ocurrirá también el 18, esta vez en el Jesús Guridi. Allí, el director titular de la Banda. Luis Orduña, llevará a los presentes por Una mirada hacía Armenia. En este caso, se interpretarán piezas del georgiano Aram Khachaturian y del norteamericano Alfred Reed, composiciones muy relacionadas con el folklore y la música de Armenia. En el recital contará con un papel protagonista el flautista Alberto Itoiz.
Un verano "muy positivo"
"Este ciclo es una gran oportunidad para disfrutar de la calidad de nuestra Banda de forma gratuita y en dos emplazamientos diferentes a su escenario habitual", apunta la concejal de Cultura Sonia Díaz de Corcuera. Son conciertos que se van a producir justo cuando la agrupación va a ofrecer el último recital que queda de su programa estival.
"La valoración de este verano es muy positiva", apunta Orduña, quien subraya que "tenemos un público muy fiel" que está haciendo que cada vez sea necesario poner más sillas en el Jardín Secreto del Agua, "auditorio al aire libre" ya consolidado para estos conciertos. "Además, esta vez no hemos tenido que suspender ninguna actuación por el tiempo". Es de esperar que la guinda que llegará el día 12 en El Pilar, coincidiendo con las fiestas del barrio, pueda contar también con el respeto de la lluvia.
