La cuadragésimo sexta edición del Festival de Jazz de Gasteiz está ya en plena cuenta atrás. Por primera vez desde 2021 no se va a organizar nada en domingo, aunque parecía una de las novedades que se querían introducir poco a poco en el certamen. Habrá que ver qué sucede en el futuro. Pero antes de mirar más allá, toca disfrutar de una jornada de clausura que viene cargada de alicientes, pensando también en el gran público. Además, ya era hora de que Sílvia Pérez Cruz actuase en Mendizorroza. Demasiado se ha esperado.

En este día de cierre, también bajan la persiana todas las actividades paralelas del programa oficial, aunque todavía mañana habrá algunos bares y pubs que aprovecharán para seguir proponiendo música en directo a quienes se hayan quedado con las ganas después de que el festival baje su simbólico telón.

En cuanto a sus dos escenarios principales, esta jornada también va a ser especial con respecto al Principal. A la espera de que se cumplan los trámites con respecto a su reforma, teatro y festival van a tener que separar sus caminos de cara a 2024. Está por ver por cuántos años será. Para este último concierto, que arrancará a las 17.30 horas, se contará con Yamandu Costa, guitarrista y compositor brasileño de referencia que se va a presentar a solas en el centenario edificio de la calle San Prudencio.

Con su guitarra de siete cuerdas, Costa –que ganó su primer Grammy hace un par de años– puede presumir a sus poco más de 40 años de contar con una trayectoria envidiable, también compartida con grandes nombres de la escena internacional y orquestas de relevancia. De Bobby McFerrin a la Orquesta Nacional de Francia, el abanico es enorme.

Desde Mendizorroza

Ya a las 20.30 horas, los sonidos se centrarán en la última doble sesión que se vivirá en el polideportivo. Por cierto, que antes, a las 19.30 horas saldrá de la Virgen Blanca una comitiva musical que terminará su senda en Mendizorroza. Ya allí, el primero en hacer acto de presencia será un viejo conocido de la capital alavesa como Ariel Brínguez.

En esta ocasión acude al festival con su quinteto y el proyecto que el saxofonista ha llamado Nostalgia cubana. El disco del mismo nombre vio la luz en 2021, mostrando el personal acercamiento que el músico ha querido hacer a grandes canciones de su tierra natal.

Tras él, la guinda la pondrá Sílvia Pérez Cruz. Se podría hablar del Premio Nacional de Músicas Actuales, del Goya o del Max que tiene en casa, pero no harían justicia a lo que esta artista es capaz de hacer en el estudio y, sobre todo, en directo. Una voz con un sello propio y una idea de la creación y de la música muy particular –contraria a los tiempos actuales– han convertido a la de Palafrugell en un referente.

En este caso, acude a la capital alavesa dentro de la gira de su más reciente disco, un Toda la vida, un día, que se lanzó el pasado mes de abril. Se hizo realidad entonces un proyecto que empezó a dar sus primeros pasos cuando todo se paró, allá por marzo de 2020. Algo bueno tenía que salir de todo aquello.