Aunque alguno no se lo crea, suelen salir ideas muy interesantes de los paseos por el monte. Les pasó un buen día a Eva Gonzalez de Matauko e Iñaki Carretero. En ambos casos, en sus años de formación, lo audiovisual tuvo un peso específico, y en aquel recorrido, los dos se preguntaron si, en una localidad de 42 habitantes como Maturana, sería posible hacer un festival de cine con películas o rodadas en el medio rural o cuya temática tuviera que ver con él. Aquella cuestión tiene ya respuesta. Se llama Matuzine Aitzurra Fest y este viernes y sábado vive su primera edición.

Los dos días de proyección, el programa arrancará a las 19.00 horas, siendo la iglesia el punto de encuentro. “Tenemos una sola luz navideña, una estrella en el campanario, y como esta se ve de lejos, será el cartel de neón de nuestra sala de proyecciones”, sonríe el conocido y veterano cuentacuentos Iñaki Carretero.

La entrada a cada día cuesta dos euros, aunque es necesario reservar plaza a través del correo electrónico matuzine@gmail.com. Se pondrá calefacción, aunque se recomienda acudir con manta. Además, en vez de palomitas, habrá caldo y chocolate, también para acompañar los coloquios que se producirán a lo largo del certamen.

Así, en la primera jornada será protagonista el western alavés Algo más que morir, de José Luis Murga y Oier Martínez de Santos. Este último acudirá a encontrarse con el público y recordar la aventura que supuso aquel rodaje, lo que se completará con el visionado del reciente documental Kuartk Valley, de Maider Oleaga, que fue estrenado en el Zinemaldia de 2021. “Tanto Oier como Maider han puesto todas las facilidades posibles”, una predisposición que se ha repetido para hacer posible el segundo día.

Rodaje de ‘Amama’, dirigida por Asier Altuna.

Rodaje de ‘Amama’, dirigida por Asier Altuna. K.ALMANDOZ

“Cuando llamamos a Asier Altuna para explicarle de qué iba el festival, le gustó tanto la idea que nos propuso al instante hasta venir”. Dicho y hecho. Así, el día 10 se podrá ver Amama, también estrenada en el Festival de Cine de San Sebastián en 2015, lo que se completará con los cortometrajes Artalde y Topeka, así como con la charla compartida con el realizador.

“Vamos a ver cómo sale, pero en todos los preparativos estamos viviendo una implicación tan importante por parte de la gente, que tenemos muchas ganas de darle continuidad” a una idea que quiere ser “muy rural”. Por ejemplo, “si en los festivales grandes se hace un lunch, aquí vamos a hacer una merienda rural con tortilla de patata, chorizo a la sidra y vino”, una cita gastronómica con la que se pondrá el broche a estos dos días intensos.

Jornadas en las que también habrá tiempo para otras citas paralelas. Así, en esta primera edición se va a hacer, con los jóvenes de la localidad, un taller sobre cómo llevar a cabo un cortometraje rodado con teléfonos y dispositivos móviles.

“Los vecinos están entusiasmados y nosotros queremos hacer cosas que impliquen a cuantas más personas, mejor. Además, queremos recuperar películas relacionadas con el medio rural que igual se han quedado perdidas para muchos”, un objetivo que ahora se está haciendo posible gracias a que “por casualidad, a finales de agosto, conseguimos un poco de financiación y nos animamos”. De momento, toca vivir y disfrutar la primera edición. La gran pantalla se enciende en Maturana.