- Intérprete, compositor, investigador y pedagogo, el músico vasco Gorka Hermosa prosigue con su compromiso con la dignificación del acordeón en su nuevo disco, Blanchard Strings, que presentará en directo en la Filarmónica de Berlín el año próximo. El álbum del músico, que ha tocado todos los palos, colaborado con múltiples artistas y viajado a varios continentes, está ya disponible en las plataformas digitales.
Diego Vasallo, Paquito D`Rivera, Jorge Pardo, Ara Malikian, Luis Auserón, Chambao, Malevaje, Carmen París, Javier Peixoto, Iñaki Salvador, Joao Afonso, Borja Barrueta o Javier Ruibal conocen bien las habilidades al acordeón de Hermosa, un músico inquieto que se ha acercado con su acordeón a variados estilos, de la clásica a la contemporánea, el tango, el jazz, el folk, el flamenco, el fado...
Músico que ha actuado en China, Irán, América y Europa, acaba de publicar su nuevo disco, tres años después del anterior, el alabado Ele, Lauaxeta-Lorca (Artimaña Records), en colaboración con Jon Maia y Jesús Prieto Pitti. Lleva por título Blanchard Strings, está ya disponible de forma gratuita en las plataformas digitales y tiene previsto presentarlo el 21 de marzo de 2021 en la Filarmónica de Berlín.
La Filarmónica se ha sumado a la ola de reconocimientos que está recibiendo en los últimos tiempos Hermosa y le ha encargado una nueva composición para acordeón y orquesta de cuerda, además de la oportunidad de presentar algunas de las obras que se incluyen en su último disco. Este repertorio, grabado ahora pero que ha sido ya interpretado por 20 orquestas en tres continentes, lo comparte con el grupo de cuerda que da nombre al álbum.
Libros Hermosa cuenta también con varios libros relacionados con el acordeón, que se pueden descargar gratis en su página web, y es habitual también que escriba artículos. El último lleva el título de Juan Bautista Busca: El primer acordeonista Vasco. En él da las claves para que, en su opinión, el acordeón o la trikitixa se haya convertido en "la música vasca por excelencia hoy en día" a partir de la obra de Bautista, que vino al Estado desde Italia a trabajar en las obras del ferrocarril Madrid-París en el siglo XIX con un acordeón bajo el brazo y cambió por completo la identidad de la música vasca.