- "Hay mucha gente que estas semanas está volviendo a leer o a dedicarle más tiempo a la lectura. Los libros están sirviendo como salvavidas" en estos tiempos de pandemia y confinamiento, como describe Ander Gondra, co-fundador de Sans Soleil. Aún así, no hay duda de que este 23 de abril se celebra un Día del Libro cuando menos diferente a causa del covid-19. Extraño. Por supuesto, también para las pequeñas editoriales como la alavesa. "Ojalá hoy haya gente que se acuerde de que seguimos haciendo libros que algún día verán la luz".
La actividad de puertas hacia adentro, de hecho, no se ha detenido. "En quince días terminaremos cuatro proyectos que tenemos entre las manos. Pero claro, ahora mismo no sabemos cuál será la fecha de publicación. Es un trabajo que no es en balde pero sí sin liquidez. Es un esfuerzo no retribuido", una situación compartida con el resto del sector. "En España hay un mundo editorial muy rico y variado, pero de esta situación puede que salgamos la mitad", perdiéndose un "ecosistema muy interesante", un modelo que si el parón se alarga y si no hay ayudas específicas (medidas de promoción de la lectura, ayuda a la compra, líneas de crédito...), va a quebrar, sobre todo por los lados más débiles de la cadena. "Es fundamental arrimar el hombro entre todos, entre las editoriales, las librerías..., sobre todo entre quienes estamos por la labor de lo pequeño y lo cercano".
En este sentido, Gondra tiene palabras especiales para las librerías, para ese "espacio principal de visualización de los libros". Lugares donde casi no tuvo tiempo de estar Con las maletas a otra parte. La emigración española hacia Europa en el cine de Marta Piñol Lloret. "Llegó a la distribuidora 48 horas antes de que todo se parase por el estado de alarma. Eso le ha pasado a muchos títulos, que se han quedado detenidos en el tiempo. Y no sabemos qué pasará. Pero es posible que cuando esto pase, haya tal número de libros por salir, que muchos se van a quedar sepultados".
Tampoco ha tenido suerte la gran apuesta para este semestre de la editorial alavesa, que justo se iba a publicar en torno al Día del Libro, una reedición revisada de La caja de Pandora de Panofsky. "Teníamos mucha ilusión porque creíamos que iba a funcionar muy bien, máxime coincidiendo con esta fecha. Pero habrá que esperar a tiempos mejores. Claro, ésta es otra de las situaciones que nos suceden a las editoriales pequeñas. Este libro necesita de un buen momento, de un contexto, de un acompañamiento... y es probable que no lo podamos sacar en cuanto esto pase".
Todo ello sin perder de vista la agenda de ferias y encuentros tan habituales en estas fechas y en las que Sans Soleil iba a estar presente. De hecho, en este 2020, la editorial alavesa iba a debutar en la Feria del Libro de Madrid, con todo lo que ello implica. Sin olvidar tampoco la participación en la Fira Literal Barcelona, por ejemplo. "Ambas se han retrasado casi a las mismas fechas, cuando ya hay otras citas programadas y sin que esté claro que unas y otras se puedan desarrollar. Vamos a ver qué pasa porque las ferias son importantes y no solo por una cuestión de ingresos. Pero tampoco podemos llevarlo todo a los tres últimos meses del año".
De momento el camino sigue, aunque, tras participar en las últimas semanas en varios encuentros virtuales con diferentes colegas del sector, la editorial ha decidido ralentizar también la venta online desde su página web, más allá de que plataformas como Amazon no detengan su paso. Sin embargo, para Sans Soleil hay dos cuestiones básicas en este tema. Por un lado, "si nosotros nos ponemos a vender on-line mientras las librerías están cerradas, se puede generar un desequilibrio que para nosotros no tiene sentido". Por otro, "queremos respetar a todas las personas que se encargan de los repartos para que no pongan en riesgo su salud".
Entre otras citas importantes, la firma alavesa iba a acudir esta primavera por primera vez a la Feria del Libro de Madrid
"Es posible que cuando esto pase, haya tal número de libros por salir, que muchos se van a quedar sepultados"