madrid - Colgado el cartel de no hay entradas el pasado fin de semana en la octava edición del Dcode en Madrid, que congregó a 25.000 personas en una única jornada, la cosecha veraniega de festivales se despide en España rompiendo sus propios récords y sin freno a la vista.

Así lo reflejan los datos ofrecidos por distintos organizadores: el top 10 de la temporada estival de 2018 se saldó con aproximadamente 2.057.000 espectadores, cerca de medio millón más de personas que en 2017 (1.580.000 asistentes).

Mad Cool, que ha pasado de 135.000 asistentes a 240.000, cerrará 2018 como el mayor festival en cuanto a número de visitantes por jornada y el tercero en asistencia global por detrás del Arenal Sound de Burriana (Castellón), que, con 300.000 espectadores, se ha topado de forma súbita con el Medusa Sunbeach de Cullera (Valencia), que replicó esa cifra después de reunir a 165.000 personas en 2017. A los festivales del podio les siguen el Primavera Sound de Barcelona, que también batió su mejor registro al reunir a unos 220.000 asistentes (208.400 el pasado año); el Rototom Sunsplash de Benicàssim (Castellón), con 208.000 frente a los 250.000 de su anterior edición; y el Viña Rock de Villarobledo (Albacete), que repitió números: 250.000 personas.

Por detrás, el Festival Internacional de Benicàssim (FIB), que congregó a 168.000 asistentes (177.000 en 2017), y el Dreambeach, que ha anunciado ya su primera edición internacional en 2019 en Chile tras reunir en Villaricos (Almería) a 155.000 personas (160.000 el pasado año). Completan el top 10 el Weekend Beach Festival de Torre del Mar (Málaga), que mejora en 8.000 personas los 132.000 asistentes previos, y la edición número 25 del veterano Sónar de Barcelona, que reunió a 126.000 asistentes, la cifra más alta de su existencia (123.000 en 2017).

Pero no se acaban ahí las buenas noticias. A la llegada de festivales nuevos como O Son do Camiño, en Santiago de Compostela, que se estrenó con 90.000 espectadores, se sumaron otros que mejoraron sus cifras, como el Bilbao BBK Live!, con 120.000 amantes de la música en directo. Otros, como el Sonorama de Aranda de Duero (Burgos) retuvieron los 100.000 espectadores de la edición anterior. - Javier Herrero