DONOSTIA. El director titular de la sinfónica vasca, el estadounidense Robert Treviño, estará al frente de seis de los once programas previstos para el curso 2018-2019, entre ellos el de su apertura en 27 de septiembre en Pamplona y el de la clausura del mes de junio.

Treviño ha presentado hoy junto al director general de la OSE, Oriol Roch, y el viceconsejero vasco de Cultura, Joxean Muñoz, las actividades previstas, que tienen las "variaciones" como hilo conductor, con las que propondrán al público "abrir la mente" para buscar "conexiones" donde no parece que las haya.

Dvorak, Elgar y Rachmaninov son ejemplos de ese juego que propone la orquesta, tres compositores que no parecen tener mucho en común, pero que vivieron "la incertidumbre y el desarraigo".

Sobre estos tres autores se pondrá el foco esta temporada, en la que de la mano de conceptos como "resistencia, conflicto y reconciliación" se podrán escuchar obras de otros genios de la música clásica como Shostakovich y Britten.

La Orquesta de Euskadi prestará también atención los compositores vascos. De hecho en el primer programa de abono, que llegará a las tres capitales vascas y a la navarra, se interpretará "Hilarriak", de Ramón Lazkano, y en noviembre se estrenará "Agata", una composición del pianista Stephen Hough sobre temas vascos que contará con el txistulari Garikoitz Mendizabal.

La coral Andra Mari volverá a estar presente en la programación, en abril de 2019, para interpretar tres obras corales de Beethoven bajo las órdenes del austríaco Hans Graf, en un concierto en el que intervendrá el pianista Alfonso Gómez.

Además, el 22 de febrero se estrenará "Izozmendi", de Xabier Otaolea, en un único concierto en Gasteiz, donde sin embargo no se ha programado, por impedimentos técnicos, "Marie Antoinette", un montaje del Malandain Ballet Biarritz con música de Haydn que se presentará en San Sebastián, Pamplona y Bilbao ese mismo mes y con el que la OSE regresará al ciclo "Opera Royal: les grandes concertes de Versailles" en marzo.

No será ésta la única salida al extranjero de la sinfónica vasca, que está trabajando para poder "formalizar una gira", de la que Oriol Roch ha preferido no dar hoy más detalles.

Se mantienen las colaboraciones con Musika-Música de Bilbao, la Quincena Musical de Donostia, el festival Musique en Côte Basque de San Juan de Luz, el Festival de Música de Donostia, Musikaste y la Asociación Bilbaína de Amigos de la Ópera, cuya temporada pasada se vio afectada por la huelga de los músicos de la orquesta.

Para la próxima, además de participar en las óperas "La Bohème" y "I Lombardi", lo hará el 20 de marzo en el "Concierto de la ABAO", una gala lírica protagonizada por la soprano Jessica Pratt.

Un "esfuerzo importante" que ha hecho la OSE para el nuevo curso es el de la "calidad" de los artistas invitados, nombres de primerísimo nivel", que después ejercen de "embajadores" de la agrupación vasca por el mundo. "Hemos actuado de forma estratégica", ha señalado Treviño.

El primero en llegar será el trombonista y director sueco Christian Lindberg, que estará al frente de la sinfónica en noviembre con obras de Berstein y Sibelius y una composición propia, "The Tale of Kundraan", pieza para orquesta y trombón.

La francesa Mélanie Levy-Thiébaut la dirigirá en el ballet "Marie Antoinette" y en el concierto de Gasteiz del 22 de febrero, mientras que el israelí Pinchas Zukerman será su batuta en los cinco conciertos de marzo en los que interpretará el Concierto para violín de Beethoven y la Sinfonía número 8 de Dvorak, compositor del que Stephen Hough tocará su poco conocido Concierto para piano a finales de noviembre.

Pablo Ferrández será el intérprete con su Stradivarius del Concierto para violonchelo de Dvorak en el penúltimo programa de abono y Volodin del Concierto para piano número 3 de Rachmaninov en la clausura de la temporada.

Rachmaninov será también protagonista en las actuaciones de principios de febrero que dirigirá Treviño, quien asimismo estará al cargo de la orquesta en mayo de 2019 para un programa dedicado íntegramente a la Sinfonía número 9 de Mahler.