Dentro de nada se estrenará la adaptación al castellano. Además, se preparada una gira por distintos escenarios europeos, eso sí, en su versión en euskera, la misma que hoy llega a la cuadragésimo segunda edición del Festival Internacional de Teatro de Gasteiz. No es la Obabakoak de Bernardo Atxaga, aunque el escritor haya mostrado por carta al reparto su satisfacción con el trabajo realizado. Es la Obabakoak de Calixto Bieito, quien, desde que llegó a la dirección artística del Teatro Arriaga, tenía claro que quería llevar la novela a la escena sí o sí. El resultado de ese empeño se podrá ver hoy a partir de las 20.30 horas en un Principal que todavía tiene algunas entradas a la venta en el anfiteatro primero (en este caso, no se ha puesto a la venta el segundo).

“No te va a dejar indiferente. O te encanta o la nada”, apuntó ayer el actor Lander Otaola, uno de los once intérpretes que sirve de puente para el salto de las páginas del libro a las tablas teatrales. Tanto él como buena parte de sus compañeros -para algunos, va a ser la primera vez que pisen el Principal- acudieron ayer a la capital alavesa para dar algunas de las claves de un “viaje” que ni es “bello” ni “costumbrista”, según sus palabras. “No se puede adaptar el sello de Atxaga y eso Calixto lo tuvo muy claro desde el primer momento del proyecto”, añadió su colega Joseba Apaolaza.

“Al final, lo que ha hecho Calixto es tomar las cuestiones que son universales a todos los seres humanos más allá de la localización exacta de Obaba”, según Eneko Sagardoy, una apuesta que también facilitará el hecho de girar por Europa. Una visión sobre las historias creadas por Atxaga en la que, eso sí, los intérpretes reconocen haber contado con una gran libertad a la hora de sumar sus aportaciones al proceso creativo.