Santiago de Chile - La escritora chilena Isabel Allende cumple hoy 75 años con la misma energía que ha desplegado durante toda su vida de periodista, feminista y escritora y con dos novedades: un nuevo libro en las estanterías y un nuevo amor.

Nacida en Perú en 1942, de padres chilenos y naturalizada estadounidense desde 1988, cuando se avecindó en San Francisco (EEUU), Isabel Allende prepara también un viaje a Chile, donde presentará su nueva novela, Más allá del Invierno, el próximo 21 de agosto. Una obra que cumple una tradición que la autora de La casa de los espíritus ha seguido con pocas excepciones, la de publicar una vez al año, y que en sus páginas atesora principios que la han acompañado toda su vida: resiliencia al dolor, apego a la esperanza, la alegría de vivir y la capacidad de reinventarse. Todo ello a través de tres personajes: una periodista, un profesor universitario y una guatemalteca indocumentada que en medio de una gran tormenta de nieve en Nueva York descubren su fuerza interior y el verano invencible que llevan en el alma.

Isabel Allende comenzó a publicar en 1974, primero textos infantiles y luego un par de recopilaciones de crónicas feministas que aparecían en la revista Paula. Un feminismo militante que hoy ejerce exhortando al gobierno chileno a aprobar la despenalización del aborto, apoyando las causas de las minorías sexuales o condenando la violencia machista.

En 1982, ya en el exilio, apareció La casa de los espíritus, que abrió su producción de novelas y es tal vez su obra más icónica, aunque subraya que todas han dejado huella en su vida, pero ninguna como Paula (1994). Se trata de una narración autobiográfica sobre la enfermedad y muerte de su hija, cuyo desenlace la hizo sentirse fracasada como madre por no haber podido protegerla. La escritora apunta que esa experiencia le cambió la vida, al superar “tonterías” por las que antes luchaba, como el éxito y su carrera literaria. Ganadora de numerosos galardones y con más de 67 millones de ejemplares vendidos a lo largo y ancho del mundo, Allende ha debido afrontar además una crítica poco amable, que la ha catalogado como escritora comercial, productora de subliteratura o una imitadora de Gabriel García Márquez. - Nelson S. Díaz