a punto de cumplirse diez años de la muerte de Rocío Jurado, el Teatro Real acogió ayer la presentación oficial de un nuevo sello que Correos le dedica, un acto que reunió a su hija Rocío Carrasco y a su viudo José María Ortega Cano y en el que el cantaor flamenco Miguel Poveda, amigo personal de la Chipionera, puso la nota musical.
Una fotografía de César Lucas para el disco Punto de partida ha sido la elegida para ilustrar el sello, con el que la artista de Chipiona se une a otras celebridades musicales como Paco de Lucía, Camarón de la Isla, Lola Flores o Manolo Escobar, que también tienen su propia estampa.
Con una tirada de 240.000 ejemplares, el Pliego Premium cuenta con 20 sellos que reproducen un bello retrato de la artista con la melena al viento, junto a un disco de oro que representa los 150 que cosechó durante su carrera, junto a 63 discos de platino y más de 25 millones de discos vendidos. El disco está troquelado dando una forma redondeada al sello que lo hace más atractivo y tiene un valor de 0,57 euros.
“Es una pequeña obra de arte”, señaló su hija durante el acto, que calificó de “homenaje grandioso” a su madre, una auténtica leyenda de la historia musical de España. Posteriormente, en declaraciones a los periodistas, Carrasco esquivó como pudo todas las preguntas relacionadas con “las ausencias familiares” que hubo en el Real, en referencia a los hermanos y otros hijos de la cantante. “Lo importante es el sello y que Miguel (Poveda) lo ha bordado”, dijo.
El cantaor barcelonés desató la emoción entre los asistentes -también estaban la presentadora María Teresa Campos, su pareja Edmundo Arrocet y su hija Terelu, Isabel Gemio o Luis del Olmo, entre otros- al cantar, acompañado al piano por Jesús Lavilla, versiones míticas de Jurado como Se nos rompió el amor o Como una ola.
“Es una responsabilidad cantar a una de las voces más impresionantes de la música española”, dijo al finalizar, cuando también confesó sentir cierta “envidia” hacia Rocío Carrasco, “a la que tantas veces habrá cantado su madre”.
Nostalgia Ortega Cano señaló que sigue llorando cada vez que se pone un disco suyo. “Ella lo llenaba todo con su personalidad, llenaba el escenario y llena este sello”, dijo el extorero en declaraciones a la prensa.
Durante el acto, el presidente de Correos, Javier Cuesta, destacó “su voz, belleza, temperamento y la entrega” a su público. “Emitir un sello es el mayor reconocimiento que le podemos hacer”, subrayó.
El subsecretario de Fomento Mario Garcés declaró que ningún sello hasta ahora había levantado “tanta expectación” y recordó algunos pasajes de la biografía de “la más grande”, como cuando se añadía edad al principio de su carrera para poder subirse a un escenario.
De familia humilde -padre zapatero y madre ama de casa-, a los quince años tuvo que asumir el oficio paterno y trabajar en otros ámbitos como la recolección de fruta, “pero nunca perdió la inquietud por cantar”, recordó. Garcés también aportó alguna anécdota, como el premio que Rocío Jurado obtuvo en el primer concurso que ganó, en el Teatro Álvarez Quintero en 1958: 200 pesetas, una botella de gaseosa y unas medias. “Treinta años después, en 1985, estaba cantando delante de Ronald Reagan”, añadió.
Otro protagonista del acto fue Amalio, el filatélico de Chipiona que hace año y medio inició la petición a Correos para que Rocío Jurado tuviera su propio sello. - Efe/E.P.