Desde enfrentarse a zombis a explorar el infierno. Minecraft es un videojuego tipo “mundo abierto” o sandbox en el que se puede hacer prácticamente todo lo que uno quiera. En este caso, y por motivo de la Durangoko Azoka, la comunidad de jugadores euskaldunes Game Erauntsia ha construido una maqueta virtual de la feria, maqueta que se aprovechó ayer como mapa para la competición de Minecraft. A esta acudieron ocho jóvenes de entre 7 y 10 años, entre los que se encontraban Izar, Simón y Jakes. El centro de mando: el gune Kabiak. Su misión: encontrar el tesoro que los organizadores habían escondido.
Originales de Zalla y Zarautz, estos chicos de 7 y 8 años, miembros de Game Erauntsia, jugaron en equipo para encontrar las pistas antes que sus competidores. “Estamos seguros de que vamos a ganar”, decían, confiados, después de haber estado entrenando duramente las últimas semanas. Sin embargo, Erraldoi se les adelantó.
Más allá de la competición, ayer el gune Kabiak también acogió dos juegos más: Sorgina Pirulina y Euskal Herriko Pilota Virtuala. El primero es un videojuego infantil, según sus desarrolladores similar a Mario Bross, pero que versa sobre mitología vasca. “La trama principal es que Gaueko, el malo del juego, roba los poderes a todas las sorginas y Sorgina Pirulina, que mantiene parte de su magia gracias a la sacerdotisa Mari, tiene que ir liberando a sus amigas, que están convertidas en etxejaunak”, explica Santiago Córdoba, director comercial de Binary Soul, la empresa desarrolladora de este videojuego. Para ello, Sorgina Pirulina visita diferentes lugares de la geografía vasca, como Zugarramurdi u Oma. “El objetivo es que los niños aprendan la mitología vasca de una manera amena y divertida”, indica Córdoba.
Por otra parte, Euskal Herriko Pilota Virtuala es un videojuego de realidad virtual que detecta los movimientos del jugador y los transmite al juego. Ambos están en euskera, inglés y castellano, aunque el idioma principal sea el euskera.
Para Urtzi Odriozola, uno de los organizadores de Game Erauntsia, iniciativas como la de Binary Soul son de vital importancia para el desarrollo de videojuegos en euskera. “Algo que le falta al euskera es estar más presente en el ocio de las personas y los videojuegos son un punto clave”, recalca. A día de hoy, la mayoría de los videojuegos en euskera son de carácter infantil y con fines didácticos, como sería el caso de Sorgina Pirulina. “Pero también hay alguno para todos los públicos”, señala Urtzi. Minecraft, sin ir más lejos.
vivir en euskera El sector de los videojuegos está en auge pero el desarrollo en euskera todavía no ha despertado. En opinión de Iker Ibarguren, otro de los organizadores de Game Erauntsia, esto se debe a que los estudios no le terminan de ver rentabilidad a desarrollar sus juegos en euskera. “Por eso tenemos que hacernos notar, para que vean que sí que hay un mercado”, comenta Iker. Después de todo, para él los videojuegos son otra manera más de vivir en euskera. “Al igual que hay que hablarlo en la calle, también hay que llevarlo a los ordenadores y a la informática y, cómo no, a los videojuegos”.