Vitoria - Ya de lleno en su recta final, el Festival Internacional de Teatro de Vitoria vuelve a encontrarse hoy con la danza contemporánea. De hecho, se da la circunstancia de que en menos de un mes van a tomar parte en el certamen dos de los tres últimos ganadores del Nacional en este campo ya que si a finales del octubre acudió al Principal La Intrusa (compañía distinguida en este 2015 y fundada por los gasteiztarras Virginia García y Damián Muñoz), esta tarde hará lo propio Marcos Morau, galardonado en 2013 e impulsor de La Veronal.
En el escenario de la calle San Prudencio a partir de las 20.30 horas -todavía quedan entradas a la venta por 24, 18 y 12 euros-, el grupo nacido hace una década ofrecerá al público el estreno en el País Vasco de Siena. Situando a los bailarines, vestidos de practicantes de esgrima, en la sala de un museo ante un cuadro del Renacimiento, el montaje es una reflexión sobre el cuerpo “como contenedor del ser humano”, según explica el productor de la formación, Juan Manuel Gil.
De esta forma, y tomando la referencia de distintas perspectivas, se construye un montaje de casi dos horas de duración en las que sumergirse “en una aproximación a la historia del arte italiano, en un recorrido que se inicia en el Renacimiento, momento en que el ser humano retoma la consciencia de sí mismo, y llega hasta al mundo contemporáneo. Siena se pierde en este camino para llevarnos a un espacio atemporal y extraño”.
Con dirección y coreografía de Morau, en colaboración con Pablo Gisbert para la dramaturgia, la propuesta juega también con elementos visuales (fotografía y vídeo) y composiciones de Bach, Schubert, Händel, Scarlatti y Claudio Monteverdi. Todo ello dentro de la marca de la casa que La Veronal viene marcando desde su puesta en marcha en 2005, una década coincidente con la crisis económica que no está siendo sencilla. “Pero nunca nos vamos para atrás, Marcos tiene claro que la idea es lo importante”.