madrid - Concha Jerez, Premio Nacional de Artes Plásticas 2015, se define como una gran trabajadora que lleva “mucho tiempo dando la lata”, dedicada “en cuerpo y alma” a su arte. Y trabajando en el montaje de su obra en la Feria Artissima de arte contemporáneo, que se inaugurará el próximo día 6 en Turín, conoció la concesión del premio, un galardón, dotado con 30.000 euros y que concede el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, con el que el jurado ha reconocido su “dimensión pionera” en el uso de tecnologías y el hecho de ser representativa de una generación de artistas que ha marcado el tránsito de la era analógica a la cultura digital.

“Estoy muy contenta, siempre es una satisfacción por el reconocimiento que supone de tu trabajo, aunque hay otros artistas que se lo merecen igual o más que yo”, comentó a Efe Concha Jerez (Las Palmas de Gran Canaria, 1941).

Este premio, unido a la concesión en 2011 de la Medalla de Oro al Mérito a las Bellas Artes y a la exposición organizada el pasado mes de abril en Tabacalera Promoción del Arte junto a José Iges, así como a la retrospectiva “interferencias en los medios celebrada en 2014 en el MUSAC, evidencian un momento de reconocimiento. Y esto, según ironiza la artista, se debe a que “soy muy vieja” y a que se ha ido entendiendo cada vez más su arte.

Licenciada en Ciencias Políticas por la Universidad de Madrid, Concha Jerez cursó la carrera de piano en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid y fue profesora de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Salamanca entre 1991 y 2011. Desde 1970 se dedica profesionalmente al arte, ámbito en el que se inició con trabajos centrados en el desarrollo del concepto de instalación, en espacios de gran envergadura.

A comienzos de los 80 comenzó a explorar en el campo de la “performance” y desde entonces su actividad está ligada al arte radiofónico y a los medios de comunicación, en trabajos en los que en muchas ocasiones colabora con el compositor y artista “intermedia” José Iges.

Con una mirada crítica en esos medios de comunicación y su papel en la sociedad, el trabajo de Concha Jerez se desarrolla “siempre en una dualidad. En la dualidad mía y en la dualidad común. En mi obra a veces utilizo tecnología, pero también hago otro tipo de creaciones que no son tan tecnológicas. Sin embargo, en la obra con Iges sí”.

Comprometida en la defensa de la cultura, Concha Jerez cree que, a pesar de que en España hay muy buenos creadores, “se está viviendo en el mundo del arte una situación muy dura y descorazonadora. Se ha dado tanto relieve a la economía que nos hemos olvidado en general de todo aquello que genera el ser humano y que le hace crecer e ir hacia adelante”. La economía, reconoce, es algo “con lo que tenemos que relacionarnos, pero no es un fin. Lo que hace de un país algo importante es su cultura, lo que hacen sus artistas, sus escritores, sus músicos. Eso es lo que hace crecer un país”.

Frente a lo que ocurre en España, “esto en Europa es básico. No podemos competir con unas sociedades que han ido por otros cauces. La realidad de la historia de Europa y su fuerte es el mundo de la creación, y eso es lo que hay que apoyar”. La galardonada lamenta que, mientras los gobiernos no brinden este apoyo, los artistas seguirán atravesando momentos duros. - Efe