Vitoria. En su primera visita a Euskadi, el guitarrista montenegrino cierra hoy en el Principal gasteiztarra su colaboración con la OSE tras una semana y media intensa de encuentros con el público. Lo hará en un concierto que arrancará a las 20.00 horas aunque quien no tenga ya su entrada en la mano deberá esperar a mejor ocasión puesto que están todas las entradas agotadas.

A pesar de su edad, ya es un músico conocido en todo el mundo. ¿Cómo lo lleva?

Estoy muy contento por ello. Desde que era pequeño siempre he querido tocar la guitarra delante de la gente. Al principio, empecé a tocar este instrumento porque quería ser una estrella de rock, pero luego me enamoré de la guitarra clásica. Lo que no ha cambiado es que me gusta tocar delante de públicos multitudinarios, somo si fuese una estrella. Estoy feliz de tener esta vida y me siento muy afortunado, aunque haya trabajado duro para ello.

¿Cuándo se enamoró de la guitarra clásica?

Este instrumento me hipnotizó cuando descubrí un LP viejo de Andrés Segovia. Mi padre me lo puso cuando era pequeño, lo escuché y pensé que era lo más mágico y bonito que había oído nunca. Soñaba con que algún día pudiese tocar la guitarra de esa manera.

En su último trabajo vuelve a los orígenes de la guitarra. ¿Cree que ha habido una revolución?

Puede decirse que sí. Mi nuevo disco remite a los comienzos de la guitarra. Con esas piezas voy a través de la música que inició la revolución de la guitarra clásica. Homenaje, de Falla, es el primer tema escrito para un solo de guitarra. Después, el Concierto de Aranjuez es muy importante porque es un concierto con guitarra. Por último, con Fantasía para un gentil hombre, quería reconocer a Segovia, una figura importante que internacionalizó el instrumento.

Ha profundizado en la cultura musical española. ¿Esta diversidad cultural puede ayudar a un músico?

Claro que sí. En España la música es una parte importante del día a día y es algo que aprecio mucho como músico. Por ejemplo, un estilo que me entusiasma como guitarrista es el flamenco. A veces me siento celoso de los guitarristas de este estilo, ya que me parece algo muy diferente; suena distinto, tienen otras prioridades. Algún día espero poder estar unas semanas en Granada aprendiendo este estilo. Aparte de eso, creo que hay muchos compositores que merecen la pena como Manuel de Falla, Turina, Rodrigo, Albéniz, Granados... Todos ellos trabajan de una forma muy cercana al corazón. Me inspiro en ellos muchas veces.

Va a actuar con la OSE pero también tocará en solitario. ¿Qué diferencias hay?

Es muy diferente. Cuando estás solo puedes hacer la música que quieres. Además, creas un ambiente íntimo y estas cómodo, seguro. Si te equivocas, no importa, sigues adelante. En la orquesta están el director, todos los músicos y estás tú. Es una trinidad divina, porque tienes que buscar el equilibrio entre las tres partes. Siempre es diferente, se aprende algo nuevo, aunque interpretes un tema que has tocado muchas veces. Además, la energía que siento al tocar con la OSE es única.

También va a participar en una clase magistral. ¿Qué cree que puede enseñar a los alumnos y qué puede aprender de ellos?

Cuando enseñas, también aprendes. Quiero hablar con los estudiantes y ver cómo tocan, porque no hay nada tan gratificante para mí como eso. Dar una clase magistral a estudiantes avanzados sobre un repertorio ya conocido para mí puede servirles porque aporto mi propia experiencia y puedo decirles lo que he aprendido de mis errores. Sé que voy a disfrutar mucho con ellos.

Empezó en 2011 y desde entonces no ha parado. ¿Piensa seguir con ese ritmo? ¿Qué planes tiene ahora?

Este año no voy a parar. En febrero sale a la venta mi nuevo CD y haré una gira por todo el mundo. Tendré conciertos en Chicago, Cleveland, Atlanta, Múnich... Pero después de este proyecto, descansaré un poco, porque quiero moverme en una dirección completamente diferente. Mis tres primeros trabajos servían para presentarme. Ahora quiero utilizar mi experiencia y mis amistades en el mundo de la música para crear un disco de colaboraciones. En cuanto al estilo, me apetece hacer algo más experimental.