"¡Pero si los hombres hubiesen amado de otro modo a la mujer! Mira, lo veo claro, lo sé, las mujeres seríamos de otro modo", escribe una joven María Zambrano a su novio, Gregorio del Campo, en una de las casi 70 cartas inéditas que ven la luz ahora, veinte años después de la muerte de la pensadora. Unas cartas inéditas de una María Zambrano veinteañera pero muy intensa en las que se vislumbran todos sus temas y preocupaciones.