BUENOS AIRES. Gardel fue inscrito el 11 de diciembre de 1890 en el registro civil de Toulouse, según han revelado los autores del libro, el argentino Juan Carlos Esteban y los franceses Georges Galopa y Monique Ruffié, que consiguieron aclarar el misterio en torno al cantante de tango más célebre de todos los tiempos.
La madre de Gardel, Berthe Gardes, huyó a Argentina cuando el pequeño tenía solo dos años tras ser apartada por su familia por haber sido madre soltera con tan solo 19 años, todo un escándalo para la época. El joven Gardel estuvo indocumentado, para evitar ser llamado a filas durante la Primera Guerra Mundial de presentarse en el Consulado francés, hasta 1920.
Entonces, según se relata en el libro, para poder viajar y actuar en España se aprovechó de un decreto de 1906 del Gobierno del Uruguay, que preveía la protección a ciudadanos uruguayos en otros países y se desplazó a este país, donde se registró como Carlos Gardel, nacido en Tacuarembó en 1887, consiguiendo de este modo un certificado transitorio por un año.
Menos de un mes después de conseguir este documento, y sin haber presentado ningún otro para justificarlo, Gardel tramitó la ciudadanía argentina, que llevaría hasta su muerte, si bien en 1933 aclaró su origen francés.
En cuanto al padre de Gardel, los autores del libro han llegado a la conclusión de que lo más probable es que fuera Paul Lasserre, quien realizó el servicio militar en la época en Toulouse, pero abandonó la ciudad dos meses antes de que naciera su hijo, al que nunca reconoció.
Según ha explicado Monique Ruffié a 'La Nación', los autores han podido hablar con una de las hijas naturales de Lassere, de 93 años y que sigue residiendo en Toulouse. "Ella tuvo dos hijos y uno de ellos tiene la idea de hacerse un ADN porque dice que es familiar de Gardel", ha precisado.