venecia. El cineasta canadiense David Cronenberg presentó ayer en el 68º Festival de Cine de Venecia su última película, A Dangerous Method, un psicoanalítico filme con el que el director cambia el registro de sus últimos trabajos y muestra la lucha entre los instintos y la razón.

La cinta, una de las favoritas para el León de Oro de la sección oficial y que fue muy aplaudida en la proyección para la prensa, lleva a la gran pantalla, en clave de relato de época, los complicados entresijos de la psique y el corazón humano encarnados en los actores Keira Knightley y Michael Fassbender. Knightley interpreta, de un modo más próximo al teatro que al cine, rayando en ocasiones en la contorsión física, a Sabina Spielrein, una joven judía con deseos de convertirse en psicóloga que conoce al doctor Carl Gustav Jung (Fassbender) en una terapia a la que llega por sufrir trastornos derivados de la relación con su padre. Entre ambos se establece una complicada relación personal, ya que él está casado y se debate entre hacer lo que se supone que es lo correcto y le indica su código deontológico o dejarse llevar por sus deseos.

En esta historia, inspirada en hechos reales y adaptación de la obra teatral The Talking Cure, de Christopher Hampton, entra en juego también la presencia de Sigmund Freud, mentor de Carl Gustav Jung y al que da vida en el filme el actor Viggo Mortensen, con quien Cronenberg repite experiencia tras sus últimas películas Promesas del este (2007) y Una historia de violencia (2005). Entre esos tres personajes se establecerá un triángulo epistolar que tendrá como base lo adecuado del método de terapia llevado a cabo por Jung, cada vez más aparentemente alejado del que propone Freud, y la posible motivación sexual que se encierra detrás de la mayor parte de los comportamientos humanos. "David (Cronenberg) se ha centrado en reflejar la relación entre esos personajes, su sentido del humor, por esto es que muchos estáis aquí, porque os habéis divertido", afirmó Mortensen. "No trata la cuestión académica solo, sino que David nos ha hecho interpretar personas con diferentes opiniones. Una cosa que se ve en el filme es que sus posiciones intelectuales no eran tan distintas, era una cuestión de orgullo. Ellos se comportan de modo infantil como muchos pacientes a los que intentaban ayudar", agregó.

En esta complicada historia, localizada en el Zúrich y Viena de los albores de la I Guerra Mundial y que en la gran pantalla conserva mucho de sus componentes teatrales originales, es figura clave el actor Vincent Cassel, quien interpreta al doctor Otto Gross, el personaje más cómico de todo el filme. Gross se convierte en el demonio que juega a convencer a Jung de dejarse llevar por los instintos sexuales, toda vez que en este filme de razón y represión no falta ni siquiera las prácticas masoquistas encarnadas en el personaje de Knightley. "Soy actriz, por eso evidentemente estoy loca", dijo la actriz. "Nuestro reparto tiene una gran necesidad de psicoanálisis y he puesto este tema en la película de una forma sibilina para que pudiera ser tratado", apuntó el propio Cronenberg entre las risas de los actores.

el desafío de kate winslet La serie televisiva Mildred Pierce es el trabajo "más desafiante" que ha realizado Kate Winslet desde Titanic. La actriz presentó ayer en Venecia esta serie con aspecto cinematográfico que dirige Todd Haynes (Lejos del cielo) y que ha recibido 21 nominaciones a los Emmy. "Trabajar en televisión es mucho más duro que el cine", afirmó Winslet. Sin embargo asegura que "es un lujo" poder tener cinco horas para contar una historia, lo que permite no tener que cortar nada, como ocurre en el cine, y destacó la enorme calidad de las actuales producciones televisivas. Mildred Pierce, basada en la novela homónima de James M. Cain, cuenta la historia de una mujer abandonada por su marido en la época de la Gran Depresión en Los Ángeles.