Los Ángeles. Apareció con un minivestido blanco y sorteó la lluvia de flashes. Sin embargo, Lindsay Lohan no estaba en ninguna alfombra roja, sino que se disponía a entrar en el jugado. La actriz, acusada de robo, se declaró el miércoles inocente y rechazó las acusaciones de haberse apropiado indebidamente de un collar de oro en una joyería. Sin embargo, el juez Keith Schwartz no se conformó con un rápido intercambio de palabras. Quiso aleccionar a la actriz con una advertencia seria: "Si infringe la ley de nuevo, irá a la cárcel". "Usted no se diferencia de los demás, así que no se exceda", advirtió. "El robo, siguió, es un delito grave. ¿Entiende usted la gravedad de la situación en la que se encuentra?", insistió el magistrado. "Sí, señoría", respondió ella. Es por ahora la acusación más grave contra la actriz de 24 años, que desde que fue detenida por conducir bajo los efectos del alcohol en 2007 ha pasado en varias ocasiones por la cárcel y en reiteradas ocasiones se ha sometido a curas de desintoxicación. Se encuentra todavía en libertad condicional. Lo que sí se le evitó el miércoles en Los Ángeles es la embarazosa comparecencia esposada. No obstante, tuvo que aceptar que se le tomara una prueba de saliva, para una comparación de ADN, requisito obligatorio en todo proceso judicial. El juez impuso además una fianza que el equipo de Lohan saldó de inmediato: 20.000 dólares por la acusación de robo y otros 20.000 más por la violación de la condicional.
El 23 de febrero, tendrá que comparecer de nuevo ante los jueces y, en caso de ser declarada culpable, podría ser condenada a hasta tres años de cárcel. Lohan quedó en libertad en enero tras una cura de varios meses de desintoxicación. Poco después, una joyería en Venice la denunció por haber robado un collar de oro con piedras semipreciosas. La Policía encontró imágenes en un vídeo de vigilancia en las que se ve a Lohan con la joya en el cuello. Una empleada de la actriz devolvió posteriormente el collar a la joyería y alegó que se había tratado de un malentendido. Lohan, aseguró, solo quería probarse el collar.