BILBAO. En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Urgell ha manifestado que el Plan de Cultura del anterior Gobierno "tenía un plan muy ideologizado, que hacía incómoda la participación a muchos ciudadanos".
"La Cultura debe ser de todos. Todos hacemos cultura desde nuestras perspectivas y lógicas y todos debemos participar en esa magnífica tarea. No hay por qué hacer una separación de qué es ser vasco y hacer cultura vasca, sino que hay que dar concurso a todo el mundo para esto sea realmente enriquecedor", ha indicado.
En este sentido, ha calificado de "topicazos" que se diga que el actual Ejecutivo quiere "minimizar la nación vasca para mirar a Madrid". "Es absurdo, nosotros no miramos a Madrid, miramos al mundo. Ahí tenemos el instituto Etxepare, que estamos poniendo en marcha en este momento. Nuestra idea es que Euskadi tiene que mirar fuera. No puede ser una isla cultural, una especie de parque temático de la cultura vasca. Tenemos que ser tanto vascos como mundiales", ha señalado.
A su juicio, "eso se consigue abriendo las mentes y no cerrándolas". "La cultura isla es un fracaso, tenemos que dar al mundo y recibir del mundo", ha apuntado.
En la jornada en la que se celebra en el Museo Guggenheim de Bilbao del pleno del Consejo vasco de Cultura, ha manifestado que este órgano tendrá como "cometido fundamental" será "compartir, hacer trabajo en común y aconsejar en materia de política cultural".
"La idea es trabajar en el seno del Consejo el renovado Plan Estratégico de Cultura, lo que llamamos el Contrato Ciudadano por las Culturas, que será presentado hoy. Nuestra idea es que haya una nueva reunión del Consejo hacia finales de enero, principios de febrero, y en este intervalo, lo participantes en el Consejo examinarán el documento y tendrán oportunidad de realizar sus aportaciones", ha indicado.
Por ello, cree que, en un mes largo, habrá "un documento base ya inicial cerrado", aunque "el contrato ciudadano por las culturas tiene vocación de ser un documento abierto y en permanente revisión".
"Es un documento muy abierto que intenta ser una autopista por que la que todos los vascos, independientemente de nuestra ideología, de nuestro origen, de muestro género y vivencias, nos sintamos cómodos y quedamos todos en la tarea común, que es mejorar el nivel de la cultura en nuestro país", ha indicado.
Tras reconocer que existe la Cultura vasca, "que es lo que producen los vascos cuando hacen cultura, y tiene unos rasgos específicos que ha hacen singular y espacialmente valiosa", ha señalado que "se ha vendido una especie de homogeneidad de la Cultura, que choca radicalmente con la realidad, que es que cada ciudadano de este país vive de una manera diferente la cultura". "Todas las maneras de vivir la cultura son válidas y enriquecedoras, y es esa suma la queremos retratar", ha subrayado.