ACABA de clausurarse el segundo Festival de Radio y Televisión de Vitoria-Gasteiz con otro éxito para Fila Dos y su carismático líder, Joseba Fiestras. Dentro de las jornadas del mismo se incluyeron encuentros culturales en los que se analizó el presente y futuro de este medio-mensaje-masaje. Mikel Lejarza, actual presidente de A3 Films y con larga y aquilatada experiencia en los medios, expuso en una de estas sesiones su visión del futuro que aguarda a la televisión. Un futuro ligado a tres factores: tecnología, grandes empresas de comunicación, nuevos sistemas de distribución y todo ello ligado al gusto cambiante del público que pasará del consumo masivo al individualizo activo gracias a las tecnologías digitales. En este mirar la bola que desvele los caminos del futuro, Lejarza insistió en no perder de vista el objetivo finalista del medio, que no es otro que el entretenimiento y la necesidad de tener historias para contar, argumentos distintos a los habituales en el mercado. El futuro va por contar historias singulares con un lenguaje de calidad, desde los aspectos técnicos hasta los ritmos y presentación de las secuencias narrativas. El gran reto de las empresas está en conjugar las posibilidades técnicas de lo digital, que cada día aportan al mercado un instrumento nuevo, mejorado, enriquecido y los contenidos de las factorías de ficción que soportan las parrillas de programación. De los iniciales años de este medio hasta la actualidad hay una continua aceleración y necesidad de cambio constante en los productos televisivos. Una serie de éxito hace diez años hoy sería un rotundo fracaso, que sonaría a demodé y gagá para los espectadores. Es la furia compulsiva de la televisión que lo engulle todo y nada le satisface para pervivir. Es un medio que pide el cambio constante en contenidos, formatos y presentadores. Ave fénix digital.