"Los personajes de Una familia moderna son entrevistados sin camuflajes. Hablan de lo que les está pasando y vemos qué les pasa. Se trata de una serie de la ABC. Navega por un humor prudente, no exento de trallazos espléndidos, como cuando recuerda que Superman es un tipo que entró ilegalmente en el país. No se trata de demoler la institución, pero tampoco de reinventar La casa de la pradera".