aldito miserable!". Con este improperio, Avelino Porretas se quejaba ante su octogenario padre, Segismundo, de las humillaciones constantes del ricachón don Honorio. Esta escena ocurría en La saga de los Porretas, un serial radiofónico sobre una familia de clase media, emitido entre 1976 y 1988. Alejado del tono melodramático de Ama Rosa, introducía un poco de humor en aquel postfranquismo. Es verdad que, para quienes nacieron con más de dos canales de TV, el título La saga de los Porretas no evocará más allá que un grupo fumando porros. Sin embargo, a muchas otras personas, recordar hoy esta Saga les transportará a un tiempo lejano, desde el que han cambiado muchas cosas. Entre ellas, está la propia radio (que, desde sus primeras emisiones hace casi 100 años, se ha amoldado a nuevos aparatos, programas, oyentes...). Entre las cosas que no han cambiado tanto, está el sistema de pensiones, cuyo embrión también acaba de cumplir un siglo (en 1919 se creó el Retiro Obrero, primer sistema de jubilación pública a nivel estatal). Su escasa cuantía sigue siendo reprochada: las Plataformas de Pensionistas denuncian que en la actualidad 150.000 mujeres pensionistas y 45.000 hombres pensionistas perciben en Euskadi una pensión inferior a 720 €. Ante ello, la reivindicación de pensiones dignas, tan vieja como Los Porretas, sacará hoy a la calle a miles de personas. Secundaremos su movilización, también porque de su conquista presente se beneficiarán en el futuro quienes no conocieron a Elena Francis, ni llamaron al Club de Amigos para pedir una canción. Y no deja de ser una casualidad que hoy, Día de la Radio, coincida con estas movilizaciones. Pero será divertido buscar entre la multitud a Avelino Porretas, bufando "Malditos miserables" para denunciar unas pensiones que no son "malditas" ni mucho menos, pero sí "algo miserables".
