MADRID. El doctor Flandes ha explicado que está indicado en pacientes con enfisema pulmonar grave "con un importante atrapamiento aéreo" y se calcula que en nuestro país se podrían beneficiar de este sistema entre 30.000 y 40.000 personas.

El enfisema es un trastorno en el que los alvéolos se inflan de manera excesiva, lo que produce una disminución de la función respiratoria.

Está asociado principalmente al tabaquismo continuado y es una manifestación de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), ha señalado el doctor Flandes.

Además, puesto que causa fatiga al llevar a cabo esfuerzos muy pequeños, toda la actividad normal del paciente, desde atarse los cordones hasta ducharse está muy limitada.

Las primeras pacientes que se han sometido en España a esta técnica han sido dos mujeres, las dos fumadoras severas; una de ellas de 60 años y otra más joven, a las que se les implantaron diez "muelles" en el pulmón derecho y en el izquierdo, respectivamente.

La colocación de los muelles se realiza con anestesia general o sedación profunda, lo que permite una recuperación más rápida del paciente; de hecho, ambas mujeres fueron dadas de alta a las 24 horas sin ninguna complicación.

A los dos meses, estas dos pacientes deberán ser sometidas a una nueva intervención para colocarles muelles en el pulmón contrario, con el objetivo de conseguir una mayor eficacia.

El doctor Flandes ha indicado que el enfisema pulmonar grave provoca que el pulmón sea menos elástico, por lo que el tejido queda distendido, empujando el diafragma hacia abajo e impidiendo que el paciente pueda respirar correctamente.

Con la implantación de los muelles en el pulmón se consigue una mejora importante de la calidad de vida de los pacientes, que empiezan a respirar mejor y con menos fatiga, ha señalado.

El dispositivo, de entre 12 y 15 centímetros, se asemeja a un muelle y está elaborado con un material llamado nitinol (aleación de níquel y titanio), que no produce ningún tipo de alergia ni rechazo y tampoco tiene magnetismo.

Los muelles se colocan a través de un broncoscopio y con la ayuda de una técnica de radioscopia, que facilita la visualización del lugar preciso de implantación.

En cada intervención se implantan alrededor de diez muelles por pulmón, ya sea en el lóbulo superior o inferior, y a unos tres centímetros de la pleura.

El doctor Flandes ha asegurado que se trata de una técnica complementaria al tratamiento farmacológico y también puede servir de puente para pacientes graves pendientes de un trasplante pulmonar.

Al tratarse de una técnica novedosa, las dos pacientes intervenidas hasta ahora en España forman parte de un ensayo, aunque, según este doctor, este año se podría realizar en otros hospitales de la red pública, como La Fe de Valencia.

El nuevo dispositivo está autorizado desde 2010 por la Agencia Europea de Medicamentos y en el Estado español dispone de registro desde finales de 2013.

En Alemania se han tratado ya más de 1.400 pacientes y solo se han tenido que retirar en una docena de casos, debido al mal posicionamiento del muelle.