Un Baskonia coral, con la aportación de buena parte de sus efectivos –los nueve jugadores que saltaron a pista anotaron y seis de ellos alcanzaron los dobes dígitos– y con carácter estuvo a punto de tumbar al todopoderoso Olympiacos.
El conjunto azulgrana tuteó al todopoderoso líder de la competición y se hizo acreedor de la victoria gracias a un sobrio partido en el que no perdió la cara al choque durante los 45 minutos.
Los de Laso dieron ese paso adelante tras el bochorno de días atrás y se vio en pista a un equipo reconocible. Lástima que en otro final a cara o cruz, la fortuna volvió a esquivar al conjunto gasteiztarra. Cruel.
La soberbia actuación de Williams-Goss en el tramo final y el acierto exterior de Fournier –6/8 en triples (75%)– acabaron condenando al Baskonia. El director de juego estadounidense fue una pesadilla para los de Laso.
Entre el último cuarto y la prórroga anotó ocho puntos, buena parte de ellos gracias a su verticalidad y capacidad para romper la defensa con sus penetraciones o por su facilidad para sacar faltas a los defensores azulgranas.
Buena prueba de ello es que acabó con nueve faltas recibidas, lo que le permitió irse hasta en 14 ocasiones a la línea de personal. Un puñal que hizo mucha sangre. Buena prueba de ello es que Williams-Goss se quedó a un paso del triple doble, ya que a sus 9 faltas recibidas, añadió 8 asistencias y sus 19 puntos. Clave.
LOS MOSQUETEROS DEL BASKONIA
Como el propio Fournier con sus 22 puntos, McKissic, con otros tantos, y el búlgaro Vezenkov que acabó con 19. Entre los cuatro anotaron 82 de los 102 puntos del cuadro heleno. Un cuarteto prácticamente imparable.
El Baskonia también gozó de un tridente de lo más poderoso. Luwawu-Cabarrot, Rogkavopoulos y Samanic fueron los tres mosqueteros de Laso ante el Olympiacos. Un tridente de lujo que firmó un partido sobresaliente.
Luwawu-Cabarrot (25), Rogkavopoulos (14) y Samanic (17) anotaron 56 de los 101 puntos del Baskonia
Entre el alero francés, el exterior heleno y el interior croata anotaron 56 de los 101 puntos del Baskonia. Un Cabarrot que firmó un tercer periodo excelente acabó con 25 puntos y 22 créditos de valoración.
El alero galo parecía estar tocado por una varita mágica en un tercer periodo en el que en tan solo 8:23 minutos anotó 17 puntos con tan solo un falló en tiros de campo tras acabar con un 2/3 en tiros de 2 y un 4/4 en triples, más un pleno en su tiro de personal.
Rogkavopoulos, por su parte, fue de nuevo ese microondas que reactivó al Baskonia y permitió un ligero despegue en un segundo cuarto perfecto. El heleno, que acabó el duelo con 14 puntos y un 2/2 en tiros de 2, un 2/3 en triples y un 4/4 en libres, se desmelenó en los 4:42 primeros minutos del segundo cuarto logrando ocho puntos sin fallo (1/1 en T2, 1/1 en T3 y 3/3 en lanzamientos de personal.
La tercera pata ofensiva de este Baskonia fue el recién llegado Samanic, más que correcto una vez más, con 17 puntos, el segundo máximo anotador del Baskonia, pese a ser el sexto jugador en minutos jugados (17:49).
Sin embargo, este equipo coral se quedó otra vez a un paso de alcanzar la orilla. Otro final cruel. Un paso adelante sin premio.